La muerte ‘golpeó’ muy fuerte a dos familias santandereanas. Jorge Eliécer Guerra Herrera y José Gregorio Angarita Roa fallecieron días después de sufrir aparatosos accidentes de tránsito en Bucaramanga.
El primer siniestro se registró el 31 de julio, a las 4:08 de la mañana, en la vía que comunica a Bucaramanga con Girón, en el sector del puente El Bueno. Al parecer, a Jorge Eliécer le habría ‘ganado’ la curva del retorno y se habría estrellado contra un poste o una señal de tránsito. Aún las causas no son claras, pues el siniestro no fue reportado en el momento ante las autoridades y la motocicleta que iba conduciendo fue movida del lugar.
El joven, de 24 años, fue hallado sobre el pavimento agonizando y trasladado de urgencia a la clínica Bucaramanga y desde ese día permaneció interno luchando por su vida, pero el jueves, su estado de salud se agravó e inevitablemente, murió.
Un ‘fantasma’ lo mató
El pasado 3 de agosto, José Gregorio Angarita Roa, de 46 años, ingresó muy grave al Hospital Universitario de Santander. Al parecer, un vehículo lo habría arrollado cuando intentaba atravesar la carretera, en el kilómetro 5 vía Matanza- Bucaramanga justo en la vereda Rosa Blanca.
Según se pudo conocer, el carro lo embistió, lo dejó abandonado y emprendió la huida. Nadie sabe nada sobre el responsable. Lo cierto, es que la vida de José Gregorio quedó pendiendo de un hilo y pese al esfuerzo del personal médico, falleció horas después.
Las dos diligencias estuvieron a cargo de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga y ahora se adelanta la investigación para saber las causas del accidente de Jorge y dar con el responsable de la muerte de José.
Ninguno de estos siniestros fueron reportados ante las autoridades; sin embargo, la Dirección de Tránsito de Bucaramanga fue la encargada de realizar el levantamiento.
Ayer los cuerpos permanecían en Medicina Legal de Bucaramanga.