Gabriel Jahner Olarte Rojas a quien llamababan “Gavino”, se encontraba allí en compañía de otras dos mujeres. En horas de la madrugada, cuando se acabó la parranada, tuvo un ‘roce’ con otro sujeto identificado como Michael Estiven Gualdrón.
Aunque Gabriel prefirió marcharse con sus amigas y evitar involucrarse en un problema, para Michael la rencilla no se había finiquitado. Los persiguió.
Algunas versiones afirman que “Gavino” ya iba herido cuando echó a correr al ver que Michael lo estaba siguiendo.
“Yo vi la pelea, y un tipo de esos se le paró a dos tipos. Volaban botellas y cuchillo pa’ todos lados, hasta que lo jodieron ahí si salieron a correr”, contó una testigo.
Gabriel perdió ventaja
En la carrera 11 con calle 8, Gabriel tropezó con un resalto y cayó. Michael logró alcanzarlo.
Allí le propinó a “Gavino” dos cuchillazos en el pecho y en el cuello.
“Las muchachas trataron de salvarlo. Le dieron patadas al otro pero el man no dejaba de darle puñal”, contó a Q’hubo otra testigo.
Cuando lo vio ahogarse en su propia sangre lo dejó a su suerte y emprendió la huida cuando vio que una patrulla de la Policía se acercaba al lugar.
Pero no pudo evadir a la justicia, unos uniformados lograron capturarlo.
A Olarte lo montaron en un vehículo de la Policía y lo trasladaron a la Clínica Foscal pero los médicos no pudieron salvarle la vida.
Un aficionado al ‘Búcaros’ y a las motos
‘Parceros’ y allegados de “Gavino” se devastaron con la noticia de su muerte. Lo describen como un joven sano y trabajador.
“Vivía con su mamá y era un pela’o. Era amante de su moto RX115”, contó un allegado de la víctima.
Olarte, de 32 años, también era un fiel hincha del Atlético Bucaramanga.
