Lo que era una juerga de tragos terminó en una pelea sangrienta en el barrio Niño de Jesús en San Gil. Dos hombres se enfrascaron en una feroz riña, por motivos aún no esclarecidos.
Con el pico de una botella se enfrentaron y ambos resultaron ‘cortados’. Uno de ellos sufrió una grave herida en la nariz por lo que tuvo que ser remitido a Bucaramanga para ser sometido a una cirugía estética.
Por su parte, el otro sujeto, sufrió cortadas en los brazos. Ambos fueron custodiados por la Policía y serán presentados a la Fiscalía para que respondan por el delito de lesiones personales.