El aberrante doble homicidio, que tiene consternados a varios ciudadanos del municipio de itagüí, ocurrió la tarde del jueves, 27 de enero, en el barrio San Isidro.
Maribel Pimienta Rivera se encontraba acompañada de su hijo, Bréiner Andrés Agudelo Pimienta, en la carrera 51 con la calle 38A. De acuerdo con un reporte judicial, al lugar arribó Jorge Alejandro Zapata García, un vigilante de una empresa de seguridad de Medellín y expareja de Maribel.
Al parecer, la mujer, de 35 años de edad, le expresó que no quería tener nuevamente una relación con él. Maribel se montó en una moto en compañía de su hijo de 17 años de edad e iniciaron marcha.
A los pocos metros, madre e hijo fueron alcanzados por un hombre en motocicleta que les disparó de manera indiscriminada. Jorge Alejandro, presunto responsable de haber baleado a su expareja y al menor de edad, salió corriendo.
Cincuenta metros más adelante, el hombre se propinó un disparo. “Él intenta hacerse daño, intenta suicidarse, no lo logra, es llevado a centro asistencial y está allí, en recuperación”, contó el comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, brigadier general Javier Josué Martín Gámez.
Maribel y Bréiner Andrés también fueron socorridos y trasladados a un centro asistencial del municipio, sin embargo, murieron.
¿Pasional?
Según el alto oficial, “la hipótesis inicial que estamos manejando y que hemos logrado evidenciar es que se trataría de un hecho de índole pasional”.
El uniformado agregó que “ya había un tipo de amenazas de acuerdo con lo informado por los familiares de la señora, por parte de este individuo. Creo que tenía algunas medidas cautelares para evitar que esta persona se le acercara a esta señora, pero ayer desafortunadamente sucedió lo que no debió haber sucedido”.
El sospechoso, quien se encuentra en el Hospital San Rafael No. 1, está custodiado por la Policía Nacional, mientras que el arma presuntamente utilizada en el doble homicidio y de propiedad de una empresa de vigilancia fue incautada.