En el parque San Pío, en la Plazoleta Luis Carlos Galán Sarmiento y en los centros comerciales Megamall, Acrópolis y Cacique se pueden llevar a los niños y niñas menores de tres años para realizar las pruebas de detección del COVID-19.
Esto se viene haciendo, explica el secretario de Salud de Bucaramanga, Juan José Rey, a partir de los últimos lineamientos emitidos por el Ministerio de Salud y Protección Social.
“Estamos priorizando a los menores de tres años porque es el único grupo poblacional que no tiene, en estos momentos, cobertura de vacunación (contra el COVID-19), debido a que no hay estudios clínicos en el mundo que miren la seguridad de los biológicos vacunas en ellos”, anotó.
Por eso, dijo el funcionario, si un menor de tres años llega a tener síntomas o resfriado debe acercarse a la red de prestación de servicios de salud o a los puntos de toma de muestras gratuitas para que se confirme o descarte contagio de SARS-CoV-2.
La muestra que se le toma a los infantes es con hisopado nasofaríngeo, ya que en estos momentos la Administración Municipal no tiene la posibilidad de tomar muestras con saliva, debido a que en diciembre se terminó el convenio con la Universidad Industrial de Santander, UIS.
“La prueba es incomoda, pero no es insegura. Tenemos unos equipos que llevan ya mucho tiempo haciendo pruebas, tienen todo el entrenamiento, para llevarlas a cabo”, con esta afirmación el secretario habló de la seguridad que las pruebas para los más pequeños de las familias.
Por otra parte, el jefe de la mencionada cartera de salud hizo un llamado a los padres para que no crean en mitos y no crean que por ser menores de tres años no se va a contagiar y a transmitir el virus. “El COVID-19 se transmite de persona a persona, independiente de la edad, por eso es muy importante que si tengo un niño con sintomatología le realice la prueba. La principal orientación es el aislamiento y que quien acompañe al niño o a la niña use permanentemente el tapabocas”.
Un informe de la Secretaría Local de Salud da cuenta que, actualmente, el 98% de los casos activos que se tienen en la ciudad tras este nuevo pico cursan con cuadros leves, permitiendo que se puedan manejar en casa.
En Santander, durante la pandemia se han presentado 1.867 casos positivos de COVID-19 en menores de tres años, 898 fueron notificados en Bucaramanga.