La reina Isabel II decidió retirar todos sus títulos militares al príncipe Andrés, que será juzgado en Estados Unidos por su presunta implicación en un escándalo de abuso sexual a una menor, anunció ayer el Palacio de Buckingham.
En un escueto comunicado emitido por la residencia oficial de la soberana británica, la Casa Real indicó que “con la aprobación de la reina y su acuerdo, los títulos militares del duque de York y sus patronatos reales han sido devueltos a la reina”.
El palacio anuncia además que “el duque de York continuará sin ejercer ninguna función pública y defenderá su caso (judicial) como ciudadano privado”, agrega la nota.
A partir de ahora, el hijo de Isabel II no podrá tampoco utilizar más el título de “Su Alteza Real” en ninguna capacidad oficial.
Nada más hacerse pública esta drástica medida, que asesta un enorme varapalo al duque y su entorno, una fuente anónima cercana a Andrés dijo a medios británicos que este “seguirá defendiéndose” de las alegaciones de Virginia Giuffre, quien ha insistido en que fue traficada cuando era menor por el millonario Jeffrey Epstein, con la ayuda de su “mano derecha” y expareja Ghislaine Maxwell, para mantener relaciones sexuales con el príncipe.
El caso contra el hijo de Isabel II seguirá adelante, después de que el juez rechazara ayer los intentos de la defensa para que la demanda fuera archivada.
La acusadora, que reside en Australia, interpuso una demanda por la vía civil contra Andrés en agosto pasado en Nueva York, acogiéndose a la Ley de Víctimas Infantiles de este estado, uno de los lugares donde dice que tuvieron lugar los abusos, además de en Londres y en una isla privada del Caribe, donde Epstein poseía mansiones.
El príncipe inglés, mientras tanto, ha negado en todo momento las acusaciones y ha dicho no conocer a Giuffre, a pesar de que los medios han difundido repetidamente una fotografía antigua en la que aparece agarrándola por la cintura con Maxwell al fondo, mientras todos ellos miran a la cámara.
La defensa de Andrés había tratado ya sin éxito de frenar el juicio por defectos de forma y la semana pasada volvió a la carga argumentando que su cliente estaba blindado ante la Justicia por un acuerdo confidencial firmado en 2009 entre Epstein y Giuffre tras una demanda presentada por la mujer en Florida.
Solicitud de veteranos
La decisión de la monarca llega después de que unos 152 veteranos de guerra de este país instaran a la monarca a que retirara estos honores a su hijo tras conocerse ayer el veredicto judicial sobre el caso.
Veteranos de las Fuerzas Navales británicas, las Fuerzas Aéreas y el Ejército de este país habían recurrido a la soberana para que despojara al príncipe de todos sus honores en una carta abierta dirigida a Isabel II, que fue divulgada ayer por el grupo antimonárquico Republic.
En la misiva, esos militares manifestaron su “disgusto y enfado” por el hecho de que el príncipe -hasta hoy- conservara todavía esos títulos, pues su posición les parecía “insostenible”.
Aunque Andrés abandonó sus funciones públicas en 2019 cuando se le relacionó con el malogrado pederasta norteamericano -que se suicidó en una prisión en Estados Unidos- y no ha vuelto a asistir a ningún acto militar, conservaba hasta ahora sus funciones en ocho regimientos británicos, que han estado en el limbo durante estos últimos dos años.