Funcionarios de la Electrificadora de Santander realizaron un macabro hallazgo en la subestación eléctrica de San Gil. El cuerpo de un bebé fue encontrado en uno de los canales del sistema.
El informe de las autoridades señaló que en la mañana de este lunes, los empleados de la Essa se encontraban realizando limpieza en el acceso de agua, que proviene del río del Fonce, cuando se encontraron con el pequeño cadáver.
Por el tamaño y las características que se pudieron observar se presume que se trata de un feto, el cual fue arrojado al río en la parte alta. El agua lo arrastró hasta la subestación de la empresa de energía.
Unidades del CTI llegaron a la zona y realizaron la inspección técnica del cadáver.