Portando 23 granadas, entre aturdidoras, de humo y de iluminación, fueron capturados cuatro jóvenes, tres de 18 y uno de 19 años de edad, por miembros de la Policía Metropolitana de Bucaramanga.
El resultado se dio sobre la 1:00 a.m. de este jueves, 30 de enero, cuando estos sujetos tomaron un servicio de transporte de aplicación metros abajo del Asilo San Rafael, específicamente en la entrada al barrio Bosque Norte.
El conductor, de acuerdo a la información que aportó a las autoridades, notó a estas personas sumamente extrañas y nerviosas, más aún porque dos de ellos llevaban bolsos militares.
El servicio era hasta el barrio Laureles, en Floridablanca, por lo que el transportador arrancó. Sin embargo, en los primeros metros el transportador hizo cambio de luces y les pitó a unos policías que vio subiendo hacia el barrio San Rafael.
Fue así que en el sector del CAI de La Virgen, uniformados procedieron a parar el vehículo para requisar a los cuatro pasajeros y al mismo conductor.
Al mirar los bolsos militares, se encontraron nueve granadas de emisión de humo, ocho granadas aturdidoras y seis granadas trampa de iluminación de luz roja.
Fue necesaria la presencia de expertos de explosivos de la Sijin de la Policía para verificar las granadas y adelantar la incautación, así como proceder a la captura de estas cuatro personas.
¿De dónde sacaron las granadas los jóvenes detenidos en CAI de La Virgen?
Los cuatro capturados fueron identificados como Keiner Robles Fuentes, Ángel Fuentes Sierra, Diego Sánchez Uribe y Sebastián Arenales Calderón. Éstos dos últimos, según la información que ellos les suministraron a las autoridades, se encontraban presentando el servicio militar en la Quinta Brigada del Ejército Nacional, en Bucaramanga.
De hecho, según lo revelado por la Fiscalía, en circunstancias que son indagadas, se robaron estos elementos del almacén de armas. Se desconoce qué pretendían hacer con ellos.
El ente acusador les imputó cargos por el delito de fabricación, tráfico y porte de armas, municiones de uso restringido, de uso privativo de las Fuerzas Armadas o explosivos agravado. Ninguno aceptó su responsabilidad y un juez decidió dictarles medida de aseguramiento de carácter domiciliario.
