Las autoridades capturaron este miércoles a cinco miembros de la banda ‘Las Zetas’, responsables de delitos como secuestro extorsivo y hurto calificado, en una operación que culminó con la desarticulación de esta organización criminal dedicada al paseo millonario en el norte de la capital.
La Policía, en colaboración con el Grupo de Acción Unificada Contra la Libertad Personal (Gaula), puso fin a una actividad delictiva que había causado serios daños a al menos 10 hombres en el sector de Galerías, específicamente en Teusaquillo.
La investigación comenzó hace un año, cuando se realizaron las primeras capturas de seis personas involucradas.
Según la Fiscalía, el grupo había logrado recaudar alrededor de 300 millones de pesos mediante la utilización de mujeres atractivas que, bajo la apariencia de compañeras, proporcionaban benzodiacepinas a sus víctimas en bares y discotecas.
Estas sustancias, que generan sedación, permitían a los delincuentes llevar a cabo sus ataques de manera más efectiva.
Las víctimas, en su mayoría hombres de entre 25 y 35 años, eran cuidadosamente seleccionadas y luego sometidas a un control absoluto, reteniéndolas entre 15 y 24 horas.
Durante este tiempo, los delincuentes les obligaban a realizar compras y transferencias electrónicas desde sus cuentas bancarias. En el proceso, eran golpeadas y amenazadas, incrementando así su vulnerabilidad.
Las mujeres eran el señuelo de la banda criminal ‘Las Zetas’
El cabecilla de la banda, alias ‘James’, desempeñaba un papel crucial al coordinar las acciones de las mujeres señuelo. A su captura se le encontraron 48 cédulas falsas, utilizadas para crear cuentas en la banca digital y para suplantar identidades de las víctimas en transacciones comerciales.
La organización contaba con roles claramente definidos; por ejemplo, alias ‘Tata’ se encargaba de reclutar cuentahabientes y facilitar los cobros, mientras que otros miembros como ‘Campos’, ‘Dilan’ y ‘Yamid’ ejercían la violencia física y psicológica necesaria para mantener el control sobre las víctimas.
Frente a la situación, el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, hizo un llamado a la ciudadanía para que denuncie cualquier actividad sospechosa, enfatizando que la colaboración de la comunidad es fundamental para identificar patrones y desarticular bandas criminales.
Galán también resaltó la notable disminución de casi 500 hurtos con este tipo de sustancias en comparación con el año anterior, lo que evidencia el impacto positivo de las acciones de las autoridades en la seguridad de la capital.