Nuevos detalles se conocieron del violento ataque con arma de fuego que dejó dos personas lesionadas en Barrancabermeja, Santander, la Policía del Magdalena Medio continúa con la investigación.
El hecho tuvo lugar sobre las 7:30 p.m. de este lunes, 16 de septiembre, cuando las víctimas departían en las graderías del parque Aguas Claras del barrio El Parnaso, en la comuna 2 del Puerto Petrolero.
Al lugar, según las investigaciones adelantadas por las autoridades, llegaron dos personas, quienes se movilizaban en una motocicleta. El vehículo era conducido por un hombre y de parrillera iba una mujer.
Justamente ella, según versiones preliminares, fue quien desenfundó un arma de fuego y la emprendió a tiros en contra de la humanidad de estas dos personas. Con el daño hecho, se dio a la fuga del lugar junto con su cómplice.
Una de las víctimas fue identificada como Duban Alejandro Carvajal, un guarda de seguridad y quien recibió un disparo en el brazo derecho. Eiwar Stiwar Córdoba Villabona, el otro lesionado, fue impactado en el tórax.
“La primera persona fue remitida a la Clínica Reina Lucía, donde recibe atención médica (no reviste gravedad) y Eiwar Stiwar fue remitido al Hospital Regional, quien se encuentra con pronóstico reservado”, se lee en el reporte de la Policía del Magdalena Medio.
La Policía reveló que Córdoba Villabona registra anotaciones en el Spoa por tráfico de estupefacientes (2017, 2022 y 2024), y se dedicaría al transporte informal como mototaxista. Se cree, al parecer, que hacia él iría dirigido el ataque, aunque todo es materia de investigación.
El Cuerpo Técnico de Investigación, CTI, de la Fiscalía se encargó de recopilar evidencias en el sitio de los hechos para tratar de esclarecer los móviles detrás de este atentado armado.
En las graderías de la cancha quedaron los cascos de las víctimas y en la vía pública las motocicletas con las que habían llegado al lugar.
El ataque a bala causó pánico y miedos entres quienes se encontraban en el escenario deportivo, incluyendo un grupo de niños que estaban practicando baloncesto a escasos metros.
“Fue un momento de angustia. Se necesita mayo presencia de la autoridad, andamos con un susto y miedo. Afortunadamente y gracias a Dios a los niños no les pasó nada, pero sí es un aviso para que tomemos más conciencia de que debemos estar más pendiente de nuestros niños y vean que necesitamos más autoridad”, relató un entrenador deportivo, testigo del caso.
