“Así la quería ver” estas fueron las últimas palabras que una mujer identificada como Katherine Andrea Caviedes Montealegre. de 35 años, escuchó antes de morir asesinada después de recibir un balazo mortal en la cabeza.

Los hechos sucedieron el pasado domingo 14 de abril en la carretera que conduce a Neiva (Huila) desde el municipio de Palermo cuando Edwin Lizcano Castillo, exesposo de la víctima, la encontró en la entrada de un motel de nombre Olimpus en compañía de quien era su actual pareja sentimental.

Las evidencias técnicas, sumadas a los 50 documentales y los testimonios de 27 personas, incluidos tres testigos oculares, dos testigos de la acusación, una amiga cercana y la madre de la víctima, llevaron a Lizcano Castillo a llegar a un preacuerdo con el fiscal. 

Como resultado, enfrentará una condena de 31 años y 3 meses de prisión por el delito de feminicidio, la cual se confirmará oficialmente el próximo martes 24 de septiembre durante la lectura de la sentencia, de acuerdo a información propiorcionada por el diario La Nación de Neiva.

El crimen en el motel

Las autoridades confirmaron que el hoy condenado se acercó hasta el vehículo donde se encontraba la pareja ingresando al motel. “Procedió a dirigirse al lado del pasajero donde estaba Katerine, accionando el arma de fuego, impactándola en la cabeza, al lado derecho”, enfatizó un delegado de la Fiscalía General sobre el desarrollo de los hechos.

El acompañante y pareja de la víctima alcanzó a correr y se encerró en la habitación del motel en un intento por salvar su vida ya que Lizcano Castillo procedió a dispararle, sin éxito. Los hechos sucedieron alrededor de las 12 de la medianoche.

Edwin Lizcano Castillo era pensionado de las Fuerzas Militares de Colombia. Además tenía antecedentes judiciales por ser indiciado en los delitos de violencia intrafamiliar e injurias por vías de hecho.

El exmilitar escapó a bordo de una motocicleta mientras que la mujer fue llevada hasta un CAI de la Policía desde donde terminó siendo trasladada a un centro asistencial donde los galenos confirmaron su fallecimiento. Dejó dos hijas, una de 15 y otra de 13 años.

El Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) y la Seccional de Investigación Criminal (SIJIN), en conjunto con la Fiscalía, lograron la captura del exmilitar en San Vicente del Caguán (Meta) donde se escondía de las autoridades.