La situación comenzó cuando una niña de 11 años reportó haber sido víctima de abuso a los residentes de Soacha. Alarmados por esta denuncia, los vecinos decidieron revisar las cámaras de seguridad para identificar al presunto agresor.
Después de confirmar que vivía en el mismo conjunto residencial, se dirigieron a su apartamento y lo confrontaron, lo que desencadenó una confrontación violenta que requirió la intervención de la Policía Nacional.
En la madrugada del jueves 11 de abril, las autoridades llegaron al lugar con una tanqueta para sacar al individuo señalado, quien se encontraba acorralado por los vecinos en su apartamento.
La comunidad, armada con palos, piedras y varillas, atacó al sospechoso, causando incluso heridas en los policías que intentaban contener la situación. Algunos residentes incluso vandalizaron la recepción del conjunto residencial y lanzaron piedras contra el Centro de Atención Inmediata (CAI) donde estaba detenido el hombre.