El dragoneante Jesús Cárdenas Barrera fue informado por sus superiores que debía estar muy temprano, antes de que el sol saliera el sábado 10 de febrero, en la Cárcel San Sebastián de Ternera de Cartagena, para ofrecer un apoyo a sus compañeros del Inpec.
Los sábados, en el centro penitenciario se realizan las visitas a los internos por parte de sus madres, esposas, novias, amigas y demás familiares de sexo femenino. Jesús estaba en el área administrativo del Inpec, pero esta vez tenía que ordenar al personal y controlar cualquier situación.
La mañana avanzaba normal, pero a las 9, tres balazos retumbaron en los oídos de todas las personas que hacían fila para entrar a la prisión y los vendedores ambulantes que se estacionan en las afueras del sitio. También hubo pánico y confusión.
Minutos antes, Jesús informó a un compañero que iba a salir de la prisión un momento para comprar algo de comer en una llamada ‘Chaza’ y no habían pasado ni 10 minutos cuando aparecieron dos hombres en moto y uno de ellos bajó, se acercó al dragoneante y le disparó.
Cárdenas recibió dos balazos en la cabeza y se desplomó en el acto. Nadie entendía qué pasaba y todos intentaban ayudar de alguna manera al uniformado que quedó al lado de aquel puesto de mecatos y con un manojo de llaves en la pretina de su pantalón.
De inmediato, otros compañeros del Inpec salieron de la garita principal o de recepción y comenzaron a auxiliarlo, además, informaron a sus superiores de lo ocurrido. Seguido, lo trasladaron a la clínica Madre Bernarda, pero los esfuerzos fueron en vano: llegó sin signos vitales.
“Trabajaremos exhaustivamente”
El comandante de la Policía Metropolitana de Cartagena, el coronel Gelver Yecid Peña Araque, llegó al lugar de los hechos y comunicó que “expresamos la solidaridad con el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario y a los familiares de Jesús Cárdenas. Estamos analizando todas las cámaras del sector y contamos con el apoyo de la comunidad para dar con los homicidas porque este hecho no va a quedar impune.
Estamos articulados con la Fiscalía y no podemos establecer una sola hipótesis, pero tenemos un despliegue en la ciudad y estamos investigando y trabajaremos exhaustivamente”.
Los sicarios
Este medio conoció, de manera extraoficial, que las autoridades tienen en su poder la grabación de una cámara de seguridad que captó a los sicarios. En ella se ve al pistolero que se acercó a la víctima a pie, lo impactó y luego corrió hasta donde estaba su compinche esperándolo en la moto. Huyeron con dirección hacia la Bomba El Amparo.
El hombre que disparó es de unos 20 a 30 años, de estatura alta, delgado, piel trigueña. Tenía un buzo de mangas largas y color gris, un jean tipo industrial, con reflectores en los bolsillos y zapatos de color café. Usaba una gorra negra. El conductor de la moto tenía buzo, pantalón, gorra y zapatos de color blanco.
No se han reportado capturas hasta el momento.
Paro nacional
Tras lo ocurrido, el Sindicato de Empleados Unidos Penitenciaros (SEUP), hizo un llamado al alcalde Dumek Turbay, para realizar una reunión urgente con el PMU.
A través de la cuenta de X, antes Twitter, el presidente a nivel nacional de la Union de Trabajadores Penitenciarios UTP, Óscar Robayo, anunció un Paro Nacional Carcelario para el lunes 12 de febrero: “necesitamos medidas de fondo, Presidente Gustavo Petro”, expresó en su cuenta de X.
A su vez, el ministro de Justicia, Néstor Osuna, solicitó al director del INPEC declarar la emergencia carcelaria. “A la familia del guardia asesinado el día hoy le mando un mensaje de dolor, de protesta y de solidaridad. Seguiremos combatiendo las estructuras criminales con contundencia. Todos tenemos que proteger a los guardias del Inpec”, dijo el ministro.