De acuerdo con el reporte de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga, el pasado domingo 26 de noviembre una motocicleta en la que viajaban dos personas se estrelló contra un vehículo particular en la intersección de la carrera 17 con calle 56 en el barrio Ricaurte.
Como pasajero o parrillero se movilizaba Jhon Alexander Hurtado, de 28 años de edad, que sufrió fuertes traumas por el choque. Una ambulancia lo trasladó a la Clínica Bucaramanga donde fue internado en la Unidad de Cuidados Intensivos, UCI.
Eran las 4:30 de la mañana y de acuerdo con los agentes de tránsito encargados del reporte, los semáforos estaban funcionando. Lo que no se sabe es quién omitió el pare, si el motociclista o el conductor del carro particular.
“Cuando llegamos al lugar el conductor del carro ya no estaba, pero se había presentado de manera voluntaria a la Estación de Policía en Real de Minas manifestando que lo iban a agredir otros motociclistas”, señaló un alférez.
El conductor de la motocicleta fue llevado al Instituto de Medicina Legal de Bucaramanga y marcó grado uno, en la prueba de alcoholemia.
“Aquí vamos a analizar videos de cámaras de seguridad para dar una versión clara del accidente. Confirmamos que el motociclista sí había ingerido bebidas embriagantes. Al conductor del carro no se le práctico la prueba porque se fue del lugar”, expresó el agente que atendió el caso.
Tras permanecer dos días en UCI de la Clínica Bucaramanga, falleció en la mañana de este martes 28 de noviembre, Jhon Alexander Hurtado, que iba como pasajero de la moto.
La Unidad de Levantamientos de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga se encargó de la inspección del cadáver y el traslado a Medicina Legal en el barrio Campohermoso.