En las audiencias que se adelantaron ante un juez de garantías de Bucaramanga se conoció que gracias a registros fílmicos se aprecia cómo trasladaron, instalaron y detonaron el artefacto explosivo, el pasado 5 de julio, en inmediaciones de la Estación Norte de la Policía ubicada en el barrio Chapinero de Bucaramanga que dejó a nueve uniformados heridos.
Los tres integrantes del Frente de Guerra Urbano Nacional del Eln fueron identificados como Alba Jackeline Lizarazo Otero alias ‘Leidy’, Diego Armando Miranda Lizarazo alias Maradona y Heyder Yesid Beltrán Gómez alias ‘Heyder’, quienes estarían involucrados en la preparación, traslado, instalación y detonación de la carga explosiva.
“De acuerdo con los elementos de prueba, estas personas, al parecer, transportaron el explosivo en un vehículo a un lugar boscoso. En este punto, presuntamente, armaron una carreta, ocultaron el artefacto entre costales y lo llevaron a la estación de policía del norte, donde lo ubicaron entre las motocicletas de los uniformados y activaron de forma remota a la 1:55 p.m.”, indicó la Fiscalía.
Los tres milicianos del Eln fueron capturados en las ciudades de Bucaramanga y Cúcuta. En los procedimientos se incautaron dos computadores portátiles, celulares, documentos y dos millones 800 mil pesos en efectivo y el carro que, al parecer, fue usado en la planeación del ataque.
Un fiscal de la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales les imputó los delitos de terrorismo agravado y rebelión. Los procesados no aceptaron los cargos y deberán cumplir medida de aseguramiento en centro carcelario.
Se hicieron pasar como habitantes de calle
La Policía Metropolitana de Bucaramanga aseguró que, gracias a labores de inteligencia y seguimiento tecnológico como videos de cámaras de seguridad e interceptación de llamadas, se logró identificar a los subversivos.
“El mismo Eln en un comunicado se atribuyó la acción terrorista y esto fue fundamental para dar con estos sujetos”, expresó el comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, el general José James Roa.
Los tres capturados son conocidos por los alias de ‘Leidy’, ‘Maradona’ y ‘Heider’. Alias ‘Lediy’ sería la cabecilla del Frente de Guerra Urbano Nacional y quien planeó el ataque contra el edificio policial. Esta mujer llegó desde Cúcuta a Bucaramanga y planificó el atentado por espacio de un mes.
El atentado terrorista ocurrió el pasado 5 de julio a la 1:30 de la tarde, cuando había cambio de guardia en la Estación Norte de Policía y en Bucaramanga había tensión por la muerte en horas de la mañana del joven motociclista Daniel Felipe Ibáñez en un accidente de tránsito en el carril del Metrolínea en la estación del Diamante, cuyas causas aún son materia de investigación.
Minutos antes de la activación de la carga, haciéndose pasar como habitantes de calle y recicladores, en una carreta o ‘zorra’ llevaban la caja con los explosivos. La dejaron abandonada entre un poste y un hito (muro de piedra) donde estaban estacionadas varias motocicletas.
Se cree que por un movimiento, cuando varios uniformados se subían a las motocicletas para continuar el servicio, el artefacto estalló dejando a nueve policías heridos y afectando cinco vehículos de la institución y tres particulares.
Se estima que el artefacto contenía más de 300 gramos de pentolita, un explosivo de uso restringido por las fuerzas militares. Además, le agregaron tornillos, utilizados como metralla, que al expandirse causaron las lesiones a nueve uniformados y afectaron los vehículos oficiales y particulares.
Los policías recibieron atención médica por politraumatismos de alta energía por explosión. Todos se recuperaron y siguen activos en servicio. Los heridos fueron: Eduar Navarro, Jaris Lucumí, Jhonatan Meza, Cristian Flórez, José Ortiz, Germán Cáceres, Cristian Gutiérrez, Luis Molina y Diego Palacio.