De nuevo el Municipio de Bucaramanga se vio obligado a exigir la reparación de varias de las baldosas desgastadas de la recién remodelada calle 37, entre las carreras 11 y 13, de Bucaramanga. Tras varias denuncias de los vecinos del sector, quienes siguen insistiendo con fotos y con pruebas en manos del deterioro prematuro de estos baldosines, se adelanta hoy una nueva reposición de las controvertidas losas.
No es la primera vez que esto ocurre. Como se recordará, hace varias semanas, luego de que también varios vecinos del lugar denunciaran los sorpresivos daños de esos pisos, el Gobierno Local ordenó la reparación de este pisos.
“Es increíble que esta vía, que fue remodelada hace sólo dos meses, evidencie en sus losas un rápido desgaste. Cada semana se dañan 50 o 100 de ellas. No entendemos qué puede estar pasando”, dijo Juan Carlos Moreno, vecino del lugar.
Luis Ignacio Forero Ávila, residente del edificio El Rey, quien fue uno de los vecinos que denunció el caso a través de misivas enviadas a la Alcaldía, solicitó una explicación sobre los materiales utilizados en la remodelación, ya que las baldosas siguen presentando problemas de resistencia al agua.
Según dijo, “allí se empleó una clase de piedra, supuestamente traída de Málaga, Santander. Notamos con extrañeza que dichas tabletas registren serios problemas de firmeza”.
Ante la denuncia, el secretario de Infraestructura de Bucaramanga, Iván José Vargas Cárdenas, en un anterior pronunciamiento, había afirmado que “el contratista está obligado a hacer los ajustes necesarios en las baldosas”.
Aseguró que la interventoría también está activa y que todas las observaciones de la comunidad son atendidas, incluyendo el cambio de las baldosas en mal estado.
Estos pisos forman parte del Plan de Revitalización del Espacio Público. Hasta el momento, la carrera 11, entre calles 37 y 43, y la calle 37, entre carreras 11 y 12, están parcialmente disponibles para el tránsito peatonal, mientras se culminan las obras en todos los frentes.
Expertos en este tipo de obras aseguran que, “si las baldosas se levantan puede ser indicio de una deficiente instalación, pero también podría ser que algo realmente negativo estuviera ocurriendo bajo las baldosas. Al tratarse normalmente de humedades en el suelo, lo que se recomienda es levantar todo el suelo, retirar todas las tabletas. Hay que mirar detenidamente qué es lo que ocurre y cómo solventar dicho problema”.
“El exceso de humedad, que puede acabar afectando a la superficie donde se montan las baldosas, puede ser debido a alguna fuga en tuberías que pasen por el suelo, o incluso en las paredes”, advirtieron los técnicos.
Sea como sea, la comunidad exige respuestas oficiales concretas para que este tramo vial, en el que se han invertido cerca de $ 1.500 millones, no se deteriore tan rápido.
Otro dato: Los bolardos de esta misma vía, que han sido derribados tras varios accidentes viales, no han sido restablecidos.
