Aunque será el resultado de la necropsia la que confirme lo que realmente pasó, Leyla Ríos tiene certeza de que su hija, de tres años, murió por consumir pólvora, específicamente “traqui-traqui”, también conocida como ‘martinicas’.
La desconsolada madre llegó en la mañana de este jueves 16 de noviembre a la morgue de Medicina Legal para retirar el cuerpo de la menor de sus dos hijas y contó, en medio de lágrimas, lo que había sucedido.
Dice la mujer que el lunes (13 de noviembre) su pequeña hija, Edisley Sofía Díaz Ríos, se puso a jugar con varias de sus amiguitas cerca de su casa, en el barrio Pablo Sexto II, en las faldas de La Popa.
“Esa noche la niña regresó tosiendo y vomitando y, además, tenía fiebre. Lo que pensamos inicialmente era que tenía una virosis, porque por acá hay varios niños así”, cuenta Leyla.
La mujer llevó a su hija al día siguiente al CAP de La Esperanza creyendo que su hija sufría la mencionada virosis y por eso los médicos le recetaron medicamentos para controlar la fiebre y el vómito.
El miércoles (15) la niña siguió igual, pero fue entonces cuando se conoció lo que en realidad habría ocurrido esa noche del lunes festivo.
“Una niña, de siete años, que esa noche jugaba con mi hija, se encontró con mi mamá (abuela de Edisley) y le contó que la vio a ella cuando se llevó a la boca un ‘traqui-traqui’. La niña le dijo a mi mamá que Edisley estaba así porque había consumido pólvora”, relata Leyla Ríos.
Al ser enterada de esa información, la mujer llevó a su hija a la Casa del Niño y contó lo que habían dicho. Los médicos que la recibieron le confirmaron, tras realizarle algunos exámenes, que la menor, en efecto, estaba intoxicada.
“Yo la llevé enseguida a la Casa del Niño, eran como a las 8 de la mañana, pero los médicos no la alcanzaron a atender bien. A la media hora a mi hija le dio un paro; la reanimaron, pero después le dio otro paro y enseguida falleció”, recuerda Leyla.
La madre de Edisley dice que si se hubiese enterado a tiempo que su hija consumió pólvora se habría podido salvar, pero esa información la conoció casi dos días después.
El cuerpo de la pequeña será analizado por peritos forenses de Medicina Legal a través de la necropsia, para determinar si la niña murió por consumir “traqui traqui”.