La operación de aplicaciones de transporte como Uber, Didi, Cabify e InDriver mantiene inconformes a miles de taxistas en el país, a pesar de que en pasados días la justicia se pronunció en favor de tales plataformas digitales.
El descontento persiste en un gran sector del gremio de transportistas ‘amarillos’, quienes consideran a tales aplicativos de vehículos particulares como una competencia desleal. Lideres transportadores convocaron una jornada de protestas para este miércoles, 25 de octubre, en Bogotá.
Tras los anuncios emitidos por parte de líderes del gremio en la capital de la República, representantes de los taxistas en el área metropolitana de Bucaramanga confirmaron este martes que “no” se unirán a dicha jornada de movilizaciones.
Así lo aseguraron a Vanguardia varios representantes del ‘poder amarillo’ en la capital santandereana y sus municipios vecinos.
Carmelo Guerrero, líder de la Asociación de Taxistas del Área Metropolitana de Bucaramanga, Asotamb, indicó en la mañana de este martes que “en Bucaramanga la asociación no estará presente. Esta protesta se realizará en Bogotá”.
William Sánchez Cortés, conocido entre el gremio y la comunidad como ‘Súper Huevo’, también aseguró a Vanguardia que “no se está organizando ninguna protesta”.
Daniel Méndez, presidente del Sindicato Nacional de Conductores y Trabajadores de la Rama del Transporte Automotor, Sinta, dejó en claro que “en Bucaramanga no se están programando manifestaciones”.
En Bogotá, líderes del gremio de taxistas anunciaron que realizarán protestas y cese de actividades a lo largo de este miércoles, 25 de octubre.
Tras el pronunciamiento de la justicia
Esta convocatoria de protestas en Bogotá por parte del gremio de taxistas surgió luego del reciente pronunciamiento de la justicia, en favor de las aplicaciones digitales de transporte a través de vehículos particulares.
Para la Corte Suprema de Justicia, este tipo de plataformas son “modelos de economías colaborativas soportadas en plataformas que usan las TIC’s (tecnologías de información y comunicación), para conectar a usuarios con prestadores de servicios.
Si bien la Corte señaló que tales economías “traen desafíos en materia de derechos laborales, pago de impuestos, o recta y sana competencia”, dejó abierta la posibilidad para que tales modelos de negocio puedan operar en el país.
Igualmente, la justicia señaló que existen vacíos en materia de regulación, para que tales plataformas puedan operar bajo la vigilancia y el control del Estado y las autoridades colombianas.
Entre sus argumentos, la Corte Suprema de Justicia indicó sobre estas aplicaciones de transporte que “no puede calificarse como medio desleal para desviar clientes, pues desconocería un derecho humano reconocido por múltiples instrumentos internacionales: gozar de los adelantos tecnológicos y el progreso de las ciencias”.
En ese sentido, la Corte enfatizó que “valerse de las TIC’s no puede calificarse por sí solo como desleal… Son válidas las ventajas que no tienen origen en la trasgresión de una norma, sino en un desarrollo ingenioso, eficiente, innovador, u otras probables virtudes del comerciante”.