Las primeras investigaciones e indicios que tienen la Policía y la Fiscalía para esclarecer la muerte de Kevin Steven Sierra Díaz, son una presunta rivalidad que tenía con uno de los sujetos que estuvo presente en el momento de su asesinato. Había amenazas de muerte entre, la hoy víctima, y sus agresores, que terminaron por volverse una realidad.
El Homicidio se registró en la madrugada del domingo, se estima que a las 2:00 de la mañana, en el barrio El Rosal, en el norte de Bucaramanga cerca al barrio El Pablón. Kevin se encontraba en un establecimiento público ingiriendo bebidas embriagantes y salió del negocio a tomar aire, sin pensar que sería uno de sus últimos suspiros de vida.
Hasta ese negocio llegaron cuatro personas, un taxi los dejó a una cuadra y el conductor se quedó a la espera que volvieran. Del vehículo de servicio público se bajaron dos hombres y una mujer conocida como ‘Emy, quienes fueron a buscar a Kevin para enfrentarlo.
“Hubo un intercambio de palabras entre estas personas y la víctima. ‘Emy’ sacó una pistola traumática e hizo varios disparos, después llegó otro de los sujetos y este sí, con un revólver lo hirió”, aseguró un testigo.
Malherido con un proyectil que le ingresó por la zona de la axila derecha, sin orificio de salida, sus amigos y residentes del barrio El Rosal lo embarcaron en un vehículo y lo llevaron al Hospital Local del Norte, con la esperanza de salvarle la vida. Pero, pese a los esfuerzos de sus conocidos llegó sin signos vitales y falleció.
Sus homicidas luego de dispararle, salieron huyendo en el taxi que los esperaba a una cuadra. De inmediato se inició una persecución por parte del Grupo de Operaciones Especiales de la Policía, Goes.
“Hicimos un plan candado, teníamos la información hacia donde se dirigían y logramos ubicarlos”, señaló el general José James Roa, comandante de la Policía Mebuc.
Cuando los sujetos se movilizaban por el sector conocido como ‘Paso Malo’ en la vía entre el barrio Bavaria y Centoabastos, los uniformados los interceptaron.
Uno de los sujetos intentó salir corriendo por unas escaleras del sector, pero su escape no dio frutos.
“A uno de ellos conocido como ‘Jhon’, le hallamos un revólver calibre 38, con el que creemos atentó contra el hoy occiso. También detuvimos a la mujer, alias ‘Emy’, con la pistola traumática. Al conductor del taxi por su complicidad y un individuo más, alias ‘Jaider’, que fue el que señaló a la víctima para el atentado”, indicó una fuente de la Policía.
Los móviles del homicidio estarían relacionados con intolerancia social y problemas personales entre Kevin y los sujetos que lo asesinaron.
En sus redes sociales el joven había publicado que era estudiante de las Unidades Tecnológicas de Santander.
