Cuando la Policía estaba a punto de capturar a un bandido que acababa de robarse una moto, varios vecinos del barrio María Paz, al norte de Bucaramanga, le dieron refugio al delincuente para que la Policía no lo pudiera arrestar.
El hecho ocurrió este viernes, luego de que la víctima se percatara que su motocicleta, la cual había dejado estacionada en un parque, había sido robada.
El hombre fue alertado por el sistema GPS de la moto que le indicó que se encontraba en movimiento. De inmediato informó a la Policía que desplegó un operativo por toda la zona.
Pocos minutos después, gracias al GPS una patrulla que se encontraba en la zona logró ubicarla y comenzó la persecución del delincuente.
Al verse acorralado, el ladrón abandonó la moto y comenzó a correr por las calles del barrio María Paz. Los uniformados lo siguieron a pie, pero le perdieron la pista al llegar a una peatonal.
Allí, el bandido encontró refugio dentro de una vivienda. Además, ninguno de los vecinos quiso informar a la Policía a cual casa entró.
La moto fue recuperada, pero el bandido escapó gracias a la complicidad de los habitantes de la zona.