De acuerdo con la coordinadora de Bienestar Animal de la Alcaldía de Bucaramanga, Alexandra Moncada, «un día después del lamentable evento, el 18 de mayo, llegamos al predio del propietario de los cuatro animales que habrían atacado al niño y encontramos que allí había ocho perros más de manejo especial».
Moncada indicó que a los caninos se les encontró en condiciones deplorables, desnutridos, deshidratados y con diversas patologías. No había agua, comida, registro de vacunas y atención veterinaria, lo que indicaba un claro caso de maltrato animal.
Tras la aprehensión preventiva de ocho animales y su traslado a la Unidad de Bienestar Animal, UBA, se adelantó una investigación del caso y las pruebas se remitieron a la Inspección de Policía de Protección a la Vida en dónde el pasado miércoles el inspector encargado determinó una multa de $46.400.000 al propietario de los caninos.
«Es la multa más alta en toda la historia de Bucaramanga que se impone por temas de maltrato animal. Además, los animales fueron declarados en abandono por lo que el propietario perdió su custodia», indicó la funcionaria.
Los animales que actualmente se encuentran en la UBA serán sometidos a evaluaciones etológicas para determinar si representan o no un peligro para otros animales y para los seres humanos.
En el caso del propietario este está vinculado a una investigación por parte de la Fiscalía General de la Nación. La Alcaldía sostuvo que los rumores de que esta persona habría desaparecido no son ciertas.