Durante mayo se llevó a cabo la celebración del Día Internacional de la Madre, un momento que busca destacar el papel de las mujeres en la crianza y protección de los niños.
Esta fecha dio la oportunidad para recordar los avances del Gobierno colombiano en sus reformas progresivas al Código Sustantivo de Trabajo, que ha creado y adicionado políticas familiares y de maternidad para incentivar la adecuada atención y cuidado al recién nacido.
Esto con el fin de orientar a las empresas a extender su compromiso con la comunidad, dando apoyo y celebrando el desarrollo de la vida de sus trabajadoras dentro y fuera de la oficina.
Al ofrecer las prestaciones de ley y dar mayores beneficios a las mujeres embarazadas, las empresas dejan ver una cultura empresarial responsable, que promueve el balance y mejores espacios de trabajo.
Algunas cifras
Según el Dane, en Colombia, en parejas con hijos de 12 años o menos, las mujeres dedicaron más tiempo al trabajo doméstico y de cuidado sin pago en comparación con los hombres. Las diferencias en el tiempo semanal van desde 3 a casi 10 horas.
Asimismo, el 83,6 % de las personas en Colombia consideran que una madre que trabaja fuera de su casa es tan buena como una que trabaja solo dentro de ella.
De acuerdo con la Cuenta Satélite de Economía del Cuidado, en su último reporte, las mujeres aportaron el 77,7% del total de horas anuales dedicadas a la valoración económica del trabajo doméstico y de cuidado no remunerado, mientras que los hombres aportaron el 22,3 % restante
A su vez, en promedio una mamá con hijos en el hogar dedicaba al día 10 horas y 2 minutos a actividades de trabajo no pago, es decir, 5 horas y 47 minutos más que los padres.
Y en las zonas urbanas, 36,9 % de las mujeres con hijos o hijas menores de cinco años afirmaron sentirse sobrecargadas con las tareas del hogar. Para las madres en general esta proporción fue de 28,4 %.
Retos
‘’Estar embarazada y trabajar al tiempo es todo un reto. Hay empresas que brindan el apoyo necesario para llevar a cabo las labores profesionales y maternales. Hacer parte de una compañía que está abierta a esas necesidades es un factor valioso durante esta etapa’’, afirmó Carolina Zuluaga, ‘tax manager’ de Kellogg Pacífico y quien se encuentra en su semana 28 de embarazo.
Con respecto a la protección de la maternidad, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), recomienda velar por el bienestar de la madre y el recién nacido; prevenir la desigualdad de trato en el trabajo a causa de su función reproductiva; y promover el principio de igualdad de oportunidades entre las mujeres y los hombres.
Esto se traduce en que las compañías se vuelven más competitivas dentro del mercado laboral y atraen al mejor talento. Adicionalmente, crean un mayor sentido de pertenencia a la empresa, permitiendo el crecimiento femenino y asegurando que las madres trabajadoras sigan formando parte de la compañía y potenciando sus habilidades.
‘’En estos ocho años que llevo en la compañía, me he dado cuenta de que la flexibilidad y un ambiente de puertas abiertas es lo que más se necesita. Esto evidencia un esfuerzo consciente por la atracción y desarrollo profesional de sus colaboradores’’, comentó Zuluaga.
Un buen apoyo en la maternidad supone que la empresa animará a las mujeres a reincorporarse al trabajo después del parto e incentivará el desarrollo de la carrera de las colaboradoras con capacidad de liderazgo.
En definitiva, esta es una necesidad inminente que las compañías colombianas deben evaluar y desarrollar en sus diferentes políticas e iniciativas de manera constante.
La reforma laboral del Gobierno Petro propone que mujeres embarazadas, padres o madres cabeza de familia solo podrán ser despedidas con autorización de un juez laboral que compruebe una justa causa de terminación.
Planear el futuro
Formar una familia es un sueño para muchas personas en el mundo. No obstante, hoy su deseo de conformación se está posponiendo para edades cada vez más avanzadas, pasando por alto el reloj biológico, sobre todo en el caso de las mujeres.
Lo cierto es que el cuerpo de la mujer va envejeciendo y a partir de los 35 años la posibilidad de quedar embarazada disminuye en un 20 %. Aunque las mujeres puedan ser más saludables y conscientes de su estado de salud, el efecto del paso del tiempo sobre el número de óvulos es inevitable. Esto, incluso, puede ocurrir mucho antes de lo que la mayoría de las mujeres esperan. Diferente al caso de los hombres, cuya edad reproductiva transcurre entre la pubertad y los 70 años.
Según la Federación Internacional de Ginecología y Obstetricia, 180 millones de parejas en países de ingresos bajos y medios sufren de infertilidad. Solo en Colombia, la Encuesta Nacional de Demografía en Salud arrojó que el 12,1 % de las mujeres de 15 a 49 años que desean una o más hijas o hijos han tenido problemas de fertilidad.
Es por esto que PlanM, una comunidad que ofrece a las mujeres información para que conozcan más sobre fertilidad y su planeación, hace un llamado sobre la importancia de estar atentos a la salud reproductiva y fomentar el acceso a información de valor para que las familias puedan planear su fertilidad y la alineen con su proyecto de vida.
“Estar informada sobre el reloj biológico puede ayudarte a tomar decisiones sobre la maternidad y su planeación para el momento indicado”.
Mujeres ocupan el 39% de cargos directivos y de liderazgo en Colombia
Según el informe Women in Science de la Unesco, Colombia se encuentra en el puesto 15 de un total de 20 países en Latinoamérica y el Caribe que fueron evaluados en temas de género e investigación. Esto entendiendo que, en el país, el 37 % de las personas que ocupan cargos de investigación son mujeres.
Otro dato importante que da luces acerca de este bajo porcentaje es la cifra de matrículas académicas de mujeres en la tecnología y ciencia, el cual es sólo el 3 %.
De igual forma, según el Observatorio Colombiano de Mujeres, para el 2021 el porcentaje de participación de mujeres en posiciones de liderazgo correspondió al 39 % en los cargos de máximo nivel decisorio en empresas. Esto representa el largo camino que aún queda por recorrer para lograr un país más igualitario.
Para crear un ambiente equitativo, es necesario que las empresas marquen una pauta, creando espacios de participación femenina y promoviendo la cooperación entre todos los integrantes de esta.
