Por redes sociales y en distintos puntos de la ciudad se adelantó una búsqueda que tuvo un feliz término. Apareció el pasado lunes en la noche.
“Queremos agradecer a todas las personas que nos ayudaron en la búsqueda. La niña apreció, llegó por voluntad propia, estaba escondida y al ver la situación decidió volver. Gracias a Dios el final no fue trágico”, dijo una familiar a Q’hubo.
El pasado 1 de mayo, la menor había salido había tomado un ‘mototaxi’ en el barrio La Esperanza Uno, en el norte de la ciudad, para dirigirse al sector 5 del barrio Transición a hacer unas tareas con una compañera de clase. Allá nunca llegó.
Desde entonces, se adelantó la búsqueda por todos los medios posibles.