No cesa el dolor causado por dos delincuentes que el pasado viernes durante un fleteo de $45 millones asesinaron a dos personas: Juan Pablo Bello Gómez y Antonio María Pinilla Gómez, en pleno centro del casco urbano de Lebrija, Santander.
Milton Jesús Pinilla Gómez, hermano de Antonio o ‘Toño’, como era llamado de cariño la víctima, en medio de su dolor mientras esperaba el cuerpo de su ser querido en la morgue de Medicina Legal, hizo un llamado a las autoridades para que haya justicia.
“Los dos asaltantes ya fueron capturados, ahora pedimos que les caiga todo el peso de la ley. No es posible que estas personas sigan haciendo más daño (…) Estamos muy tristes, con el corazón destrozado. La inseguridad está terrible, queremos que la justicia actúe”, dijo el familiar.
‘Toño’ trabajaba desde hace 12 años como administrador de un parqueadero ubicado en la calle 12 con carrera 9, cerca al parque principal del municipio, en donde sobre las 2:30 p.m. del viernes, encontró la muerte de manera desafortunada.
A esa hora llegó Juan Pablo Bello Gómez a retirar su motocicleta que había dejado guardada allí. Él era un veterinario del pueblo y habitualmente parqueaba su vehículo ahí mientras realizaba diligencias.
Esta vez, de acuerdo con las autoridades, había salido de una entidad bancaria aledaña en donde retiró $45 millones 860 mil. Pero a él dos delincuentes en moto lo seguían muy de cerca.
Fue por eso que el parrillero se bajó de la moto, se metió al parqueadero y procedió a amenazar para quitarle el bolso en donde guardaba el efectivo.
La víctima opuso resistencia, sacó un arma de fuego que tenía guardaba y disparó en una oportunidad, lesionando al fletero en el costado derecho. En respuesta, el asaltante tiró varias veces: hiriendo al veterinario en el pecho y en la espalda.
Antonio María, de 65 años, quien se encontraba cerca y era ajeno al atraco, recibió también un disparo, justo en su rostro.
Con el botín en sus manos, el ladrón salió huyendo del lugar. La víctima, gravemente herida, intentó impedir esto disparando.
Aunque los dos heridos fueron trasladados en una patrulla de la Policía, que casualmente pasaba por el lugar, al Hospital San Juan de Dios de Lebrija, nada pudieron hacer los médicos por ellos. Las heridas fueron mortales.
Las capturas
El teniente coronel Óscar Manrique, comandante del Primer Distrito Bucaramanga, reveló que “por la rápida reacción de la Policía y el apoyo de la comunidad, nos indicaron que el agresor se resguardaba en otro parqueadero. Esta persona portaba el maletín con el dinero y un revólver”.
Este sujeto, identificado como Jeison Johan Gómez Saavedra, fue capturado y trasladado a un centro médico por la herida que sufrió durante el intercambio de disparos.
“La información de la ciudadanía nos indica que el cómplice se movilizaba en una motocicleta BWS, por tal motivo con el ‘plan candado’ lo capturamos en el norte de Bucaramanga”, añadió el oficial.
Deiber Alexánder Soto Torres fue capturado en el momento en que conducía una moto Yamaha BWS, de placa OFX-29D y de color blanco.
Había cumplido años
Q’hubo conoció que Pinilla Gómez, oriundo del municipio de Betulia, había cumplido 65 años un día antes de ser asesinado. Celebró esta fecha con todos los suyos.
“Lo vamos a recordar mucho, él era un hombre alegre. Luchó mucho por la vida, tenía un problema del corazón y no pensamos que iba a morir así de esa manera. Cumplió años el 20 de abril y lo mataron el 21 de abril”, concluyó el hermano, quien señaló que siempre lo van a recordar como un gran padre, honesto, excelente trabajador y un gran ser humano.
Reincidentes en el delito
Jeison Johan Gómez Saavedra y Deiber Alexánder Soto Torres tienen un amplio prontuario delictivo en su historial.
A Jeison en las bases de datos le figuran anotaciones por hurto agravado en el 2017, otro hurto calificado en el 2019, otro caso por el mismo delito en el 2021 y el año pasado fue capturado por porte ilegal de armas de fuego, así como por hurto calificado.
Deiber, de 20 años, no se queda atrás. En el 2022 fue procesado dos veces por hurto y cuatro años atrás por el mismo delito.
Ayer, al cierre de esta edición, estos dos hombres serían presentados ante un juez por los hechos ocurridos en Lebrija. Debían responder por homicidio, porte ilegal de armas y hurto calificado y agravado.