Desde hace 25 años, Héctor Antonio Cruz Albarracín tiene una fábrica de calzado en el barrio Girardot de Bucaramanga. Es un emprendimiento familiar que genera oportunidades de empleo a 25 hogares de la misma comunidad y los productos que fabrican en “Calzado Tossy Carvajal” se comercializan en Estados Unidos. Héctor empezó muy joven a trabajar en zapatería y soñaba con tener su propio negocio; fue así como aprendió el arte de fabricar calzado y años después decidió emprender y montar su propia empresa. Inició con la línea de zapatos solo para hombre y llegó a tener 120 empleados.
“Durante los primeros años, solo fabricamos la línea de calzado para hombre y niños. Sin embargo, tras la pandemia del Covid-19 decidimos incorporar zapatos para dama y actualmente solo fabricamos tenis para mujer. Por la emergencia sanitaria nos vimos obligados a un recorte de personal, porque las actividades de venta y comercio se paralizaron. De 120 empleados pasamos a 25, pero gracias a Dios seguimos con el negocio y estamos generando empleo”, relata Héctor Cruz.
Son mil pares de zapatos los que fabrican cada semana y todos se exportan al mercado estadounidense. “La conexión para vender tenis fuera del país se dio porque una señora de logística conocía mi trabajo y me referenció con un cliente extranjero. De allá nos dicen la idea del producto y nosotros lo fabricamos. Han gustado mucho por la calidad”.
El sueño
Héctor quiere que la tradición de fabricar zapatos no se pierda, por eso le transmite el conocimiento a su familia. Hoy su conocimiento se ha convertido en un legado. Su hija mayor ya tiene su propia fábrica; mientras que su segunda hija se encarga de administrar el negocio familiar y también se proyecta con su propia empresa.
“Mi hermano Miguel hace sandalias de hombre en cuero, mi hermano Milton hace para niños y niñas en material sintético y mis hermanas trabajan con ellos. En la familia todos obtenemos nuestro sustento y hemos salido adelante haciendo y vendiendo calzado”.
La calidad, la innovación y el servicio han sido clave para que el emprendimiento de Héctor Cruz y su familia del barrio Girardot, hoy haga historia en el extranjero y se comercialice en las principales tiendas de calzado en los Estados Unidos.
*Estos contenidos fueron publicados en el periódico comunitario del barrio Santander y Girardot de la iniciativa Mi panita, mi amigo de Vanguardia y el proyecto Integra de USAID.
