El sismo tuvo como epicentro frente a la costa de Aomori, en el mar de Japón, y a una profundidad de unos 20 kilómetros, según informó la Agencia Meteorológica de Japón.
El temblor alcanzó el nivel 4 de la escala sísmica japonesa (de 7 niveles y centrada en medir la agitación sobre la superficie y los potenciales daños) en Aomori y en la colindante Iwate, y el nivel 3 en la isla de Hokkaido, al norte del archipiélago.
El terremoto no afectó a las líneas ferroviarias en esa zona del país ni a otras infraestructuras, según señalaron las compañías operadoras.
Japón se asienta sobre el llamado Anillo de Fuego, una de las zonas sísmicas más activas del mundo, y sufre terremotos con relativa frecuencia, por lo que sus infraestructuras están especialmente diseñadas para aguantar los temblores.