Los estudiantes fueron dejados a disposición del Centro Especializado para Adolescentes, Cespa, para que se les defina su situación jurídica.
Estas actividades disuasivas y de control se vienen realizando en los distintos sectores educativos del área metropolitana de Bucaramanga para proteger a los niños, niñas y adolescentes de las diferentes conductas delictivas que pueden verse afectados.
El llamado a los padres de familia y directivos de los planteles educativos para que informen oportunamente cualquier situación delictiva a la línea 123 de la Policía.