La Armada de Colombia incautó 2.600 kilogramos de cocaína que iban a bordo de un submarino que se desplazaba por el Pacífico y que tenía como destino Centroamérica.
A través de su cuenta de Twitter, el presidente Gustavo Petro afirmó que la Armada está cumpliendo un papel fundamental en la incautación a través de operaciones de interdicción de cocaína.
El submarino, informaron fuentes oficiales, trasladaba la droga por aguas del Pacífico en dirección a Centroamérica, cuando sufrió una avería mecánica en el sistema de combustible, lo que provocó una fuga de gases tóxicos.
Dentro del sumergible estaban dos cuerpos sin vida y dos personas en «malas condiciones de salud» porque, al parecer, en el interior de la embarcación hubo un accidente por la generación de gases tóxicos del combustible.
Ambos fueron transportados hasta un buque que se encontraba en la zona para brindarles atención médica. Posteriormente, los fallecidos, los dos rescatados y la droga fueron trasladados hasta el municipio de Tumaco, en el departamento de Nariño, fronterizo con Ecuador, donde quedaron a disposición del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía.
Según las autoridades colombianas, con ese operativo, que contó con apoyo extranjero, aunque no se especifica el país, «se evitó que más de 87 millones de dólares ingresaran a las estructuras financieras de las organizaciones de narcotráfico» y «que más de seis millones de dosis circularan en el mercado ilegal internacional».