Las intenciones de modificar los diseños del proyecto del metro de Bogotá tienen al presidente Gustavo Petro en una disputa con la alcaldesa capitalina Claudia López. La funcionaria aseguró que las intenciones, como son planteadas desde la Casa de Nariño, serían inviables y añadió que no se desgastará en una discusión hecha por Twitter.
“Yo no tengo la capacidad de twittear como el presidente Petro, a mí sí me toca trabajar”, señaló López en entrevista con Blu radio. La declaraciones suponen un dardo a la insistencia del presidente de modificar los planes de construcción en el metro de la capital.
La insistencia del gobierno Petro es que un tramo de la primera línea del metro sea subterráneo. Incluso, el propio jefe de Estado le pidió al consorcio chino –que se quedó con la obra– que evaluara la viabilidad técnica y financiera para que, al menos, algunos tramos fueran bajo tierra.
La respuesta del consorcio chino fue negativa porque consideraron que la modificación del contrato sería jurídicamente inviable. El sobrecosto, han señalado desde la gerencia del Metro, sería de hasta 15,3 billones de pesos.
“Yo lo que menos quiero es pelear con el presidente, yo lo quiero y voté por él. Lo que deberíamos estar haciendo es nuevas sedes universitarias o renta básica para mujeres. Pero en vez de eso, estamos volviendo a ver cómo paramos un contrato suscrito con todos los riesgos que eso tiene”, señaló López, quien ha cuestionado al presidente por saltársela a ella en la discusión.
Aunque López no está en contra del metro subterráneo, argumenta que es una opción que podría valorarse sin tener que modificar los planes actuales que ya fueron aprobados y están en marcha. La propuesta de la mandataria, entonces, para el presidente Petro es que se adicionen tres estaciones subterráneas a la primera línea para que, de esa manera, se beneficien al menos 20.000 pasajeros más.
“Esto no se va a resolver con matoneo de bodegas. Cuando no es matoneo de que van a parar las obras, es con matoneo de bodegas. Yo no puedo competir contra las bodegas del presidente o del petrismo. Esa no es mi tarea. Yo no me voy a gastar la plata de los bogotanos para contratar una bodega que le conteste al presidente”, dijo la alcaldesa a la cadena radial.
En esta disputa política ya se metió el Ministerio Público. La procuradora Margarita Cabello le pidió al Ejecutivo que revele los conceptos y los documentos que certifiquen que el contrato del metro de Bogotá se puede modificar.
“Si miramos la documentación podemos hacer un análisis para determinar si efectivamente es más beneficioso para la ciudad un metro subterráneo. Pero lo que vemos ahora es que había preocupaciones en la alteración de un contrato ya firmado”, señaló Cabello.