Aunque para las autoridades la muerte de Edixson Joel Padrón Ortega estuvo motivaba por la intolerancia de un joven de 18 años, porque no le quiso vender una cerveza, varios habitantes del barrio González Chaparro de Floridablanca que escucharon los testimonios de los acompañantes de la víctima, tienen otra versión.
Una persona que vive en el sector y pidió reserva de su identidad por seguridad, explicó que todo el conflicto se dio porque el asesino y sus tres cómplices quisieron hurtarle el celular a uno de los amigos que tomaban cerveza con Edixson, pero él lo defendió.
“La víctima antes vivía en el barrio, era mototaxista y ahora vivía en La Cumbre, él bajó el domingo (al barrio) y se puso a tomar cervezas con amigos en el parque. Cuando ya era tarde, cuatro bandidos que ya son conocidos en el barrio, quisieron ir a hurtar un celular, y ahí se armó el problema porque Edixson golpeó a uno de ellos en la cara”, explicó un habitante del barrio.
Según la fuente, los jóvenes al ver que Padrón Ortega golpeó a uno de ellos y no se dejó quitar el celular, se devolvieron a sus casas y salieron con machetes y cuchillos para agredirlos, en ese momento el grupo de la víctima se disolvió y todos comenzaron a correr.
“Del susto ellos empezaron a correr, pero lastimosamente a la víctima la encerraron cerca al salón comunal, en la calle 201A con carrera 14A, y ahí le dieron 14 puñaladas, 3 machetazos, lo golpearon con patadas e hirieron con botellas rotas. De una vez todos salieron a correr, el tipo que capturaron esa noche era el que tenía el machete”, sostuvo la fuente.
Lo enviaron a la cárcel Dos días después del hecho, las autoridades lograron enviar a la cárcel al presunto homicida identificado como Daniel Esteban Triana Tamí, pues tenían la evidencia en su contra necesaria que lo vincularía al caso, sin embargo, la fuente resaltó que no fue el único involucrado.
“Ellos se pusieron de acuerdo para que uno solo tomara la responsabilidad, y les funcionó porque hay uno preso, pero los otros tres que también hirieron a Edixson siguen libres en el barrio. Lo que pedimos es que investiguen bien lo que pasó, no fue por intolerancia, fue porque no se dejaron robar un celular”, señaló el residente del barrio.
Una relación rota La esposa de la víctima, al tener que hacer el procedimiento para retirar el cuerpo en Medicina Legal, tuvo que pasar por el barrio y solicitar a vecinos para que le colaboraran económicamente y así darle una cristiana sepultura.
“Es muy frustrante ver lo que pasó y que solo uno haya ido preso. Además es hasta por sentido común, cómo un muerto que tiene 14 puñaladas con cuchillo, golpes en todo su cuerpo, 3 machetazos y heridas con botellas de vidrio pudo ser asesinado por una sola persona. Que las autoridades sigan investigando, porque así van a dejar a varios asesinos libres”, concluyó la fuente.