Esta portuguesa es considerada mejor profesora de idiomas en el mundo del fútbol, ya que les ayudó a decenas de jugadores que llegan a torneos, como la Liga Premier, a ser bilingües. Aparte de eso, también es famosa por sus facetas como modelo y empresaria.
¡Qué pila!
Sara es políglota: habla, aparte de su lengua nativa, español, inglés, francés, alemán e italiano de manera fluida, y esto se debe a que a los 17 años participó en un programa de intercambio para estudiar idiomas. Además, estudió Derecho, ocupándose laboralmente en el Consejo de Europa, siendo traductora de textos jurídicos.
No obstante, las leyes no le apasionaron tanto como los deportes. Estudió un máster en Psicología del Deporte y Coach Mental en la escuela del Real Madrid y, además, obtuvo una certificación en Juego Mental, en Estados Unidos.
Con esos conocimientos, sumado a su talento como maestra de idiomas, Sara empezó enseñando idiomas en el equipo Porto de su país, donde les ayudaba a los futbolistas extranjeros “a comunicarse con más confianza con el cuerpo técnico y médico, con los compañeros de equipo y la gente en situaciones cotidianas”, como lo reseña en su biografía.
El éxito de su trabajo la llevó a convertirse en una de las profesoras de idiomas más cotizadas del mundo. Hoy en día les enseña a futbolistas de clubes como el Manchester City, Manchester United, Liverpool (los tres de Inglaterra), Ajax de Países Bajos, y escuadras brasileñas como Palmeiras, Flamengo y Vasco Da Gama, entre otros.
Su filosofía de trabajo
Sara enfoca su labor en estos tipos de jugadores: los que tienen propuestas para jugar en otro país, los que pretenden hacerlo, los que militan en un equipo europeo, los que juegan para sus selecciones nacionales y los lesionados.
Con ellos tiene una metodología basada en una técnica de memoria, la cual les permite a sus estudiantes aprender el idioma que necesitan en el menor tiempo posible. Algunos futbolistas, como el brasileño Arthur Melo, han logrado dominar el inglés rápidamente.
Otra faceta de la profesora
Aparte de ser abogada y una exitosa maestra de idiomas, Duque también es modelo. Posa prendas de vestido de baño y representó a su país en un certamen de belleza llamado Miss Grand Internacional.