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Q’hubo en los barrios: Villabel, un sector en donde hay de todo

El comercio de Villabel se destaca, principalmente, por sus populares casetas verdes, en las que puede conseguir desde una frutería hasta una papelería con corresponsal bancario.

Villabel es uno de los vecindarios más completos de Floridablanca. En sus calles encierra una ‘pequeñita ciudad’ que tiene desde un centro de salud hasta una casa hogar para pacientes y familiares foráneos.

Si necesita mercar, encuentra su icónica plaza; si es de fe católica tiene su propia iglesia y si necesita un colegio para sus hijos, este sector también se lo ofrece.

El comercio de Villabel se destaca, principalmente, por sus populares casetas verdes, en las que puede conseguir desde una frutería hasta una papelería con corresponsal bancario.

Sus habitantes son amables y prestos para recibir a aquel que quiera pasearse por sus calles.

La prosperidad de este sector les ha permitido tener iniciativas comunes, como la escuela deportiva Warriors, en la que estudiantes de instituciones públicas acceden a la práctica de voleibol y tienen la posibilidad de competir a nivel nacional.

Asimismo, en este barrio se respira ambiente deportivo, con una cancha de fútbol que permanece llena y con buen público, que aplaude los encuentros deportivos entre equipos de empresas y de gremios como el de los taxistas.

Villabel no tiene que envidiarle a ningún sector, pero eso sí, su gente quiere lo mejor para su barrio por lo que esperan la construcción de un sitio de reunión comunitaria. “En el terreno en el que quedaban las piscinas, queremos que se construya un sitio para que las personas puedan compartir”, acotó Efraín Osma, delegado de la Junta de Acción Comunal.

A esta voz se suma la de Luis Eduardo Prada, habitante de Villabel por más de 20 años, quien considera que el sector ha crecido para bien, con la unión de la comunidad.

“La misma gente ha sacado este barrio adelante. Ha cambiado mucho y ha crecido en comercio y habitantes”, agregó.

La finca de Isabel

De la vieja hacienda tomatera de Isabel Pineda ya no queda mucho, solo el recuerdo de sus primeros pobladores.

“Este barrio era una hacienda, sin pavimentación, que después se convirtió en lotes en los que la misma gente construyó sus hogares”, contó Osma.

Al parecer, de acuerdo con la comunidad, serían los hermanos Robledo quienes habrían potenciado la venta de lotes en este sector.

Por otro lado, esta firma constructora también donó el terreno en el que hoy está construida la Plaza de Mercado Villabel, que anteriormente era un trapiche.

Así las cosas, este vecindario se ha levantado a pulso, con ayuda de las Juntas de Acción Comunal y los líderes naturales del sector que han propiciado que Villabel sea un barrio próspero, al que no le falta nada.

Por más de 72 años de historia, sus habitantes han sacado adelante este sector tan popular.

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