Casi un año tuvieron que esperar los familiares de Juan Sebastián Londoño para volver a abrazarlo. Fueron 11 meses de angustia desde que varios sujetos se lo llevaron en contra de su voluntad a bordo de una camioneta blanca, en Aguachica
Aquel 22 de mayo 2021 comenzó la pesadilla para sus allegados, quienes no descansaron hasta tenerlo de regreso en su hogar. Ayer en la mañana el municipio se llenó de fiesta y con pólvora celebraron la liberación del joven de 22 años, muy querido en la región. Lo abrazaron y hasta se tomaron fotos con él.
Sus familiares confirmaron la noticia; sin embargo, se abstuvieron de entregar detalles del rescate, al igual que las autoridades. Al parecer, sumidos en la tristeza y en medio del temor de que le pasara algo, habrían aceptado negociar. Su rescate se habría dado en el municipio de Pelaya aunque otros aseguran que habría sido en El Catatumbo. Versiones extraoficiales apuntarían a que el joven habría estado en cautiverio en un pueblo de Venezuela y que la cifra del rescate no habría alcanzado el valor que estaba exigiendo esta banda criminal inicialmente. Después de varios días, el domingo se habría llegado a un acuerdo.
Días de zozobra
El 22 de la mayo del año pasado, a las 8:00 de la noche Juan Sebastián salió con su pareja a comer en un reconocido restaurante. Minutos después fueron sorprendidos por un sujeto que se les acercó de forma amable y lo saludó a él.
En los videos de las cámaras de seguridad se evidencia que no cruzaron más de tres palabras cuando el hombre le tocó la espalda y le pidió que lo acompañara afuera.
Juan salió y accedió a subirse a una camioneta doble cabina y de platón. Solo ellos saben qué hablaron, porque de inmediato fue acorralado por otros dos hombres por lado y lado.
El vehículo arrancó y al parecer, hubo un pequeño forcejeo dentro. Los testigos fueron pocos.
Fue la última vez vieron a Juan Sebastián, desde entonces comenzó la zozobra.
¿Eran conocidos?
Por la forma como el joven respondió el saludo del hombre, pensaron que era algún conocido; sin embargo en ese momento sus allegados aseguraron que no formaba parte de su grupo de amigos, que no lo conocían y que nunca los habían visto juntos. Llegó con una gorra que decía ‘Gaula’ y quizá eso le generó confianza a Juan Sebastián, quien además se caracteriza por ser una persona bastante sociable.