La última semana fue caótica para los habitantes de Puerto Wilches, Santander; no solo por las protestas contra el proyecto piloto de fracking de Ecopetrol, también por el horror que se desbordó en el puerto fluvial.
Al doble homicidio ocurrido el pasado miércoles en el corregimiento de Puente Sogamoso contra Mauricio Quiñones y Sergio Acevedo, se suman otros tres crímenes perpetrados durante el fin de semana. Los wilchenses tienen pavor de salir a las calles.
A Jesús lo sentaron a bala
El sábado en la tarde una ráfaga sacudió el sector conocido como Isla Siete, entre Puerto Wilches y el municipio de Cantagallo, Bolívar.
Jesús Humberto Espinoza, de 22 años y de nacionalidad venezolana, fue acribillado de varios tiros en la cabeza.
Estaba sentado en una silla plástica color rojo cuando los sicarios lo sorprendieron a bala.
De Espinoza se supo que trabajaba como transportador de carga en canoa y tenía dos hijos. Las autoridades no entregaron declaraciones sobre su asesinato pero según rumores, el nombre de Jesús figuraba en un supuesto panfleto de las Autodefensas Gaitanistas.
La mató su esposo
El domingo hacia las 7:30 de la noche ocurrió un trágico suceso en un establecimiento público en el corregimiento, conmocionó en Wilches.
Noemí Flórez, de 23 años, murió de manera absurda.
Una riña que suscitó Rulber Muñoz-quien era su pareja sentimental-, con otro sujeto, resultó fatal para ella.
Al intentar mediar en la pelea, recibió un disparo al parecer, de manera accidental. Fue Rulber quien accionó el arma. Noemí luchó por quedarse en este mundo. Alcanzaron a llevarla al Hospital San Antonio de Padua, en Simití, pero ingresó sin signos vitales.
Las autoridades desplegaron operativos y Rulber fue aprehendido. Al judicializar su captura, las autoridades confirmaron que tenía una orden judicial vigente por el delito de administración de recursos con fines de terrorismo. Ahora también debe enfrentar cargos por homicidio.
Deiferson tuvo una horrible muerte
Horas después de la muerte de Noemí, el corregimiento Bellavista se vio sacudido con una ‘lluvia’ de balas que hicieron ‘blanco’ en Deiferson Rojas, un mototaxista de 22 años y oriundo de Venezuela.
Justo lo balearon cuando se movilizaba a bordo de su máquina. Quedó tendido en el asfalto, aún aferrado a su velocípedo.
La Sijin del Magdalena Medio señaló que los autores del crimen ya estarían identificados y la principal hipótesis sobre los móviles, es que se trataría de un ajuste de cuentas por la disputa territorial del microtráfico en esa zona.
¿Qué dicen las autoridades?
Los habitantes están atemorizados porque la ola de violencia sigue causando muerte y dolor en el municipio.
Temen por su seguridad, aún más, cuando se aproximan las elecciones. Al respecto, el alcalde de Puerto Wilches , indicó que, “se articuló un dispositivo de seguridad amplio en zona urbana y rural para garantizar la seguridad. En los últimos quince días han ocurrido 6 atentados y de acuerdo con las labores de Ejército y Policía, serían por el control territorial para el microtráfico”.
