Horas eternas de suplicio padeció la esposa de Rafael Salas Acuña sin saber qué le pudo ocurrir.
La última vez que lo vio fue el jueves cuando Rafael, aprovechando su tiempo de descanso, viajó de Gámbita a su casa, en Chitaraque, para llevar unos víveres.
Luego regresó de nuevo a Gámbita abordo de su motocicleta, pues trabajaba en un molino.
Pero nunca llegó. Hasta el siguiente día le informaron a la mujer, porque ella pensó que se habría quedado y que por eso no llegó esa noche. Al no aparecer la desesperación la invadió.
La Policía de Chitaraque desplegó las labores de búsqueda por la ruta que habría tomado. Cuando llegaron al sector de Puente Mico, jurisdicción de Gámbita, hallararon rastros de que estaría en la quebrada El Gambitero.
Ayer a las 6:00 de la mañana llegaron Bomberos Voluntarios de Oiba para apoyar las labores de búsqueda y rescate.
Entre las rocas, los socorristas hallaron la motocicleta del desaparecido. Siguieron buscando y metros más adelante el cadáver.
Rafael habría perdido el control de su motocicleta y caído del puente desde una altura de 40 metros.
La Sijin de la Policía de Santander se encargará de esclarecer el siniestro.