La lamentable muerte de la joven Edith Yuliana Ariza Molina, de 18 años, ocurrió debajo del puente peatonal del barrio Quinta Granada en la autopista que comunica a los municipios de Piedecuesta y Floridablanca.
Edith Yuliana se movilizaba como pasajera en una moto Yamaha FZ, de placa XNE-51C, con la particularidad que el vehículo llevaba un baúl.
Quien conducía la moto era la mamá de la víctima, Carmen Edith Molina Araque.
Según lo manifestado por algunos conocidos, iban para la casa en el barrio Caldas de Floridablanca y, al parecer, la hija no portaba el casco mientras circulaban por la autopista.
Al llegar al sector del puente peatonal, a las 10:10 de la noche del jueves, y según las primeras hipótesis, por ir con exceso de velocidad, madre e hija se estrellaron contra el separador.
“Escuchamos un fuerte golpe y luego las vimos tiradas en la vía y acudimos a auxiliarlas. La mayor de las mujeres estaba sangrando, pero consciente, mientras que la joven sufrió un fuerte golpe en la cabeza. Unos paramédicos llegaron a auxiliarla e intentaron reanimarla, pero no respondía, los familiares pedían urgente la presencia de una ambulancia”, señaló un testigo.
Al lugar acudió la Policía y luego una ambulancia que fue la encargada de remitir a los dos mujeres al Hospital Internacional de Colombia, HIC.
“Iba muy golpeada la jovencita, el impacto fue directo contra el pavimento, ahí en el suelo ya estaba agonizando”.
Al llegar al HIC, poco pudieron hacer los médicos por salvarle la vida, un severo trauma craneoencefálico fue la causa de su deceso.
En la mañana del viernes, los agentes de Tránsito de Piedecuesta llegaron al centro médico para la inspección del cadáver y el traslado a Medicina Legal.
“En la escena encontramos un casco tirado, pero hay testigos que aseguran que la joven no llevaba puesto el de ella. La mamá manejaba y por ahora no se ha confirmado la versión que iba en estado de alicoramiento, esto no se puede asegurar. Todo apunta al exceso de velocidad y descartamos que algún otro vehículo esté involucrado”, señaló un agente de Piedecuesta.
Otra versión más indica que perdieron la estabilidad al esquivar unos baches que hay sobre el pavimento.
Sus amigos en redes sociales han lamentado la pronta partida de Yuliana.
“Un ángel más en el cielo, una niña muy sonriente, se le recuerda su ternura e ingenio. Dios sabe por qué la llamó tan joven, fortaleza para toda su familia y sobre todo a su mamá”.