Desde el pasado viernes en la noche era incierto para la familia de doña Rosa Jaimes Gutiérrez, cuál era su paradero y su estado de salud.
Ella es una mujer de 72 años, soltera, sin hijos, quien sufre de esquizofrenia y reside en una vivienda del barrio Los Cines de Piedecuesta con su hermana Juana Jaimes de 66 años.
Según el relato de Juana, ella se fue a la tienda a comprar los alimentos para la comida de la noche y cuando regresó ya no se encontraba su hermana mayor.
Desesperada por los problemas de salud que enfrenta su familiar dio aviso a otros miembros del hogar y desde esa misma noche iniciaron las labores de búsqueda.
“Subimos su foto en redes sociales y llamamos a emisoras para que nos ayudaran para dar con su paradero. Está-bamos muy preocupados porque ella ya no se orienta y sola en la calle de noche era un peligro”, señaló la hermana.
La incertidumbre se apoderó de la familia durante el fin de semana que no tenían noticias de dónde podría estar doña Rosa, temían lo peor a cada hora que pasaba.
Pero en la tarde del domingo una llamada de la Policía les devolvió las esperanzas.
La adulta mayor fue hallada en el fondo de un abismo de más de 100 metros a una orilla de la quebrada El Recreo, en la vereda El Paramito en zona rural de la población ‘garrotera’.
De inmediato miembros de la Defensa Civil iniciaron las labores de rescate de la mujer que aún estaba con signos vitales.
“No sabemos cómo llegó al fondo de ese precipicio. La verdad nos sorprende que haya sobrevivido más de 24 horas en el frío lugar. Al revisarla tenía señales de hipotermia”, expresó Juan Carlos Garzón, miembro de la Defensa Civil.
Cuatro funcionarios descendieron hasta el lugar donde estaba y después de 20 minutos de caminata por una trocha la ubicaron. La cubrieron con sábanas térmicas y la sacaron en una camilla. Presentaba un trauma en el rostro y en la cabeza.
La abuela fue llevada en una ambulancia hasta el Hospital de Piedecuesta donde permanece bajo pronóstico reservado ya que se cree que permaneció más de 48 horas en el lugar.
“Es un milagro encontrarla con vida. Ahora esperamos su pronta recuperación en el hospital. Tenía un golpe en el rostro, pero no detectamos fracturas, por lo que no creemos que haya rodado. Tal vez desorientada llegó hasta este lugar donde hay un acceso por el monte”, señaló el rescatista.
Por su parte la hermana, quien ha estado pendiente de la evolución, espera que pronto doña Rosa regrese a la casa.
“Agradezco a la Policía y a la Defensa Civil por ubicar a mi hermana. Yo soy la que la cuido. En el hospital permanece sedada y tiene un hematoma en la cabeza. Esperamos su evolución, pero gracias a Dios la angustia de saber dónde estaba terminó y ahora estaremos aún más atentos”.