Y es que no más entre el viernes y el sábado se registraron cinco homicidios, todos ellos con arma de fuego y sin registrar al menos una captura.
El último de estos casos sucedió en inmediaciones a la cancha de fútbol corregimiento de Puente Sogamoso, en Puerto Wilches, Santander, sobre las 5:00 p.m., de la tarde del pasado sábado.
Allí había llegado Arley Luna Porras, de 32 años, en compañía de su hermano Andrés Luna Porras, de 36 años, a esperar a su padre.
“Arley venía de Sabana de Torres, su hermano lo recogió y como no había nadie en la casa se sentaron en un kiosco de la cancha a esperarlo”, relató un allegado a las víctimas.
Mientras aguardaban, los pequeños deportistas del corregimiento disputaban un partido futbolístico, que era visto por los hermanos Luna Porras.
El deporte y la sana recreación se ‘tiñó de sangre’ cuando hombres armados llegaron en moto al lugar y, sin mediar palabra, atacaron a los hermanos.
El miedo se apoderó del lugar, la gente corrió despavorida mientras Arley y Andrés quedaron tendidos en el lugar. Los pistoleros hicieron lo propio huyendo del lugar sin dejar rastro.
La comunidad intentó auxiliar a los heridos, pero por Arley no hubo nada que hacer. Los disparos que recibió fueron letales y murió en el mismo sitio.
Para Andrés hubo más esperanza, otro hermano de él llegó al lugar y un vehículo lo trasladó al Hospital de Puerto Wilches, luego de allí fue remitido a un centro médico de Barrancabermeja. Se recupera de las lesiones sufridas.
“Esto es algo increíble. Él era un muchacho humilde, trabajador, hincha del América de Cali. Si uno le pedía un favor lo hacía con gusto. Lamentablemente que pasen estas cosas. Ojalá haya justicia”, añadió el ser querido.
Arley Luna laboraba como erradicador en una empresa de palma en zona rural de Sabana de Torres y anteriormente se ganaba la vida como vigilante.
Tenía tres hijos, dos niñas y un niño, quienes económicamente dependían de él.
Ambas víctimas son hermanos de Dagoberto Luna Porras, un reconocido líder y exconcejal de Puerto Wilches.
Del hecho no se reportó ninguna persona capturada ni se conocen los móviles del crimen, que son materia de investigación para la Policía y Fiscalía del Magdalena Medio.
Al parecer, según los testimonios de la comunidad, el atentado iría dirigido hacia Andrés y su hermano llevó las de perder.