Salir adelante con su trabajo como mercaderista y con las ventas de su emprendimiento era a lo que actualmente se dedicaba Javier Armando Vera Roa, un joven de 25 años, estudiante de las Unidades Tecnológicas de Santander, quien murió en un infortunado accidente de tránsito cerca al puente ‘El Bueno’ en la capital de Santander.
‘Javi’, como era conocido por sus amigos y familiares, vivía con su compañera sentimental en el barrio Provenza. No obstante lo recuerdan en el barrio La Joya porque allí creció y adelantó sus estudios básicos en el popular sector.
“Era un muchacho muy agradable, lo vimos crecer con sus hermanos aquí en el barrio. Siempre se destacó por su esfuerzo y ganas de salir adelante. Aquí siempre lo recordaremos y nos duele mucho su partida”, manifestó un vecino.
Tenía con su pareja un emprendimiento de venta de pulpa de fruta para lo cual madrugaba a Centroabastos.
El día del accidente ese fue el recorrido que sus conocidos creen que hizo, según lo relató su progenitora, Martha Cecilia Roa Muñoz.
“Dejó a un amigo en La Joya, se fue para la casa en Provenza y tomó la ruta bajando por la Terminal e ir hasta Girón. Él madrugaba para comprar las frutas y seguir adelante con su negocio. Buscaba algún día vivir de eso y dar trabajo a sus conocidos. Eran cómo las tres de la mañana para amanecer el domingo cuando conocimos la lamentable noticia”, señaló.
No hay testigos de cómo se accidentó. Su cuerpo fue encontrado en la vía después de golpear con su motocicleta un poste, metros más allá de la zona de salida de buses de la Terminal de Transportes de Bucaramanga.
Allí lo recogió una ambulancia, le prestó los primeros auxilios y fue llevado a la Clínica Bucaramanga donde pese al esfuerzo de los médicos, falleció.
“Nos dijeron que tardaron media hora en levantarlo. No sabemos si hubo otro vehículo involucrado o el ‘bache’ en esa vía. Pero él murió por el golpe”.
Lo lamentable del hecho es que después del siniestro le robaron su casco, no se sabe si también se llevaron el dinero con el que compraría la fruta, ya que en el centro médico solo aparecieron los documentos.
Su progenitora espera que le suministren las cámaras del sector para esclarecer la forma como murió ‘Javi’.
“Era un muchacho muy responsable, dedicado a su trabajo. No sabemos qué le pudo haber pasado, si algún otro vehículo lo cerró. Esperamos conocer la verdad”, expresó doña Martha.
Era estudiante de la Tecnología en Electrónica de las Unidades Tecnológicas de Santander. Además de su emprendimiento laboraba en una empresa distribuidora de licores. No tenía hijos, pero era un apoyo para sus seres queridos.
