La Federación Internacional de Fútbol (FIFA) ha cancelado el sorteo del mundial Sub-20 que debía celebrarse en la isla indonesia de Bali el 31 de marzo tras la polémica por el rechazo expresado en el país contra Israel, informó la federación de fútbol de Indonesia.
La federación indonesia informó un comunicado que no ha recibido una razón oficial por la cancelación, pero relacionó la medida con una carta del gobernador de Bali, Wayan Koster, que pidió el veto de Israel en la competición en la isla.
Está previsto que la Copa Mundial sub-20 se celebre entre el 20 de mayo y el 11 de junio en varias ciudades de las islas indonesias de Sumatra, Java y Bali.
El pasado 14 de marzo, Koster envió un carta al Gobierno de Indonesia para pedir que se vetase la participación de la selección israelí, al alegar que “las políticas de Israel hacia Palestina son inconsistentes con las políticas de la República de Indonesia”, defensora de la causa palestina.
El presidente de la federación indonesia, Arya Sinulingga, señaló que está coordinando una solución con los Ministerios de Exteriores y el de Juventud y Deportes, al tiempo que alertó de las consecuencias de cancelar la celebración del mundial.
Así, la federación advirtió de que Indonesia podría no poder aspirar a organizar otro mundial de la FIFA e incluso algunas categorías de fútbol indonesias podrían ser vetadas en algunas competiciones.
Indonesia, el país con más musulmanes del mundo, y otros miembros de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) han presentado su candidatura para acoger el Mundial de 2034.
Además del jefe regional de Bali, el gobernador de Java Central, Ganjar Pranowo, también ha pedido el veto de Israel, mientras que el pasado 20 de marzo decenas de musulmanes marcharon en Yakarta para protestar contra la participación de su selección en la competición.
Pese a las reacciones negativas a la presencia del equipo israelí, el Gobierno de Indonesia, firme partidario de los palestinos y que no mantiene relaciones diplomáticas formales con Israel, dijo que no impedirá que el país participe en el torneo pero aseguró que mantendrá su “consistente” posición respecto al conflicto palestino.
Cerca del 87 por ciento de los más de 273 millones de indonesios practican el islam, en su mayoría de forma moderada, aunque existen minorías significativas de otras religiones como en Bali, que es mayormente hindú.