Un muerto y nueve heridos dejó una masiva estampida que se presentó durante el sepelio de la pequeña Danna Sofía, quien fue abusada y asesinada por Juan Carlos Yepes Bañol, quien ya aceptó los cargos de secuestro simple, acceso carnal violento con menor de 14 años y feminicidio agravado.
Entre el dolor y la impotencia, una multitud de ciudadanos se reunió en el cementerio municipal de Chinchiná (Caldas) para exigir justicia por este vil asesinato. Durante el último adiós de la pequeña Danna, algunas personas comenzaron a gritar que alguien había desenfundado un arma de fuego.
Dicha afirmación alteró a los asistentes, quienes, intentando salvar su integridad, terminaron causándole la muerte a una persona y a su vez dejando a nueve heridos de gravedad.
Los padres de Danna Sofía, además del profundo dolor, han sido amenazados de muerte. No obstante, también se conoció que el ICBF abrió una investigación en contra de ellos por presunto maltrato infantil.