La sospecha que tenían las autoridades de que el hombre que fue asesinado el pasado sábado 27 de agosto, en el barrio Rosal del Norte, y que estaba sin identificar en la morgue de Medicina Legal de Cúcuta, sería un extranjero, resultó ser cierta.
La víctima es Christian Mohs, de nacionalidad alemana, quien vivía en España, pero el 25 de agosto, dos días antes de su muerte, llegó a la capital de Norte de Santander, al parecer, a hacer unos negocios.
Pero lo que no han podido establecer los investigadores es qué estaba haciendo este alemán en ese sector de la ciudadela Juan Atalaya. Las autoridades solo han conocido que él se hospedó en un hotel del barrio Los Caobos y ese sábado salió en la mañana con una mujer, luego, nadie lo volvió a ver.
Asesinado en la tarde
El extranjero, según se conoció, fue visto hacia las 3:00 de la tarde, caminando con una mujer por la avenida 8 con calle 3, del barrio Rosal del Norte, pero cinco minutos después, un hombre, que vestía un overol azul con unas franjas horizontales verdes y que se movilizaba en una moto, se le acercó y le disparó en por lo menos nueve oportunidades.
Una vez Mohs cayó muerto en la vía, el pistolero le habría quitado un bolso, se subió a la motocicleta y huyó con rumbo hacia el barrio Chapinero. La mujer que estaba con la víctima, también se marchó rápidamente.
Tan pronto ocurrió el hecho, habitantes de ese sector alertaron a la Policía Metropolitana (Mecuc) y cuando varias patrullas llegaron, encontraron al hombre tendido en el pavimento, sin señales de vida.
Los uniformados de inmediato solicitaron la presencia de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) para adelantar la inspección técnica, pero solo hasta después de tres horas llegaron las unidades a adelantar la diligencia, porque estaban ocupadas en una masacre que se registró en el barrio Pueblo Nuevo.
Los peritos forenses encontraron alrededor del cadáver nueve vainillas calibre 9 milímetros, a la víctima también le hallaron un celular, una cadena y otras pertenencias, pero los documentos de identidad no los tenía, por eso no pudieron saber cómo se llamaba.
Sin embargo, los miembros de la Brinho, por las características físicas de la víctima, creyeron que se trataría de un extranjero y por eso agilizaron las diligencias para identificarlo lo antes posible.
El jueves, una persona que conocía a la víctima se acercó a la Policía y lo identificó. Así lo dio a conocer el coronel Juan Carlos Ramírez Chávez, comandante (e) de la Mecuc.
Además, el oficial señaló que están trabajando con la Fiscalía para poder identificar al asesino y tener una hipótesis clara del crimen.
Lo estaban buscando
Precisamente, el jueves, por redes sociales circuló un video donde una mujer pidió ayuda para dar con el paradero de Christian Mohs, de quien no sabían nada desde hacía varios días.
“Hago esta denuncia pública, porque el papá de mi hijo está desaparecido en Colombia, en la ciudad de Cúcuta, en el hotel fue la última vez que lo vieron a él, saliendo con una mujer”, aseguró la joven que estaba buscando al extranjero.
Agregó: “desde el día sábado no se sabe nada de él. Tenía que hacer chek in ya para regresarse a España y todas sus pertenencias siguen en el hotel. Él no aparece, por favor necesito que me ayuden, necesito saber algo de él”.
Pero ayer, en la mañana, la mujer que buscaba al alemán se enteró que lo habían asesinado el 27 de agosto, en la tarde.
