A la 1:00 de la mañana del domingo, Ricardo José Rojas Guevara, un chef emprendedor, comenzó a pronunciar extrañas palabras a sus amigos y a su pareja sentimental, con quienes estaba en un evento de música electrónica que se celebró en el norte de la capital. Tres horas duró el muchacho de 26 años con una actitud salida de foco.
Entre palabras extrañas e intentos de ayudar al muchacho, sobre las 4:25 de la mañana Ricardo cayó al suelo en manos de su novio. Minutos después una ambulancia corroboró que Ricardo había fallecido. Las causas de su muerte siguen siendo un misterio, sin embargo, hay versiones encontradas entre quienes afirman que al evento le faltó más organización y atención en logística.
Por su parte, los organizadores han declarado que todos los protocolos funcionaron esa noche. La familia solo quiere justicia y respuestas.
Tragedia en el ‘Red Room 2’
La plataforma de eventos ‘TECH NO Bogotá’ fue la encargada de organizar el famoso ‘Red Room 2 Freakshow’, una fiesta que pretendió reunir artistas de música electrónica en el rancho La María, ubicado en la Calle 245 con Carrera 7.
Este fue el escenario al que Ricardo y sus amigos se dirigieron el sábado en la noche para pasar un rato inolvidable. Sus mejores amigos lo acompañaron en sus últimos minutos de vida y más tarde denunciaron aparentes negligencias.
Según acompañantes de Ricardo, la entrada al evento fue difícil y habían tantas personas que tuvieron que subirse a un segundo piso: “Nos hicimos en el primer piso pero dada las condiciones de que se empezó a llenar tuvimos que movernos hasta el segundo piso para recibir algo de aire. A la 1 de la mañana el señor ‘Pawlowski’ (un DJ) sube a la tarima y mi amigo empieza a sentirse mal (…) Habían personas que dejaron de bailar y que se unieron a ayudarnos a darle respiración boca a boca y reanimación cardiopulmonar. La chica de logística empezó a llamar a más seguridad y pedimos asistencia, y así como si nada, nos dijeron que los organizadores no habían contratado primeros auxilios. Cuando llegué con la chica de logística me confirman los que nos estaban ayudando que ya estaba muerto”, señaló el mejor amigo de Ricardo.
En ese momento, el reporte judicial habla de que al joven chef se lo llevaron a la caballeriza, donde lo sentaron en una banca. Hasta allí llegó el personal del CTI, pues el fallecimiento de Ricardo ya se había confirmado sobre las 4:50 de la mañana. Sus amigos no soltaban su mano y no dejaban de gritar su nombre.
Adiós a un gran chef
La familia de Ricardo (toda oriunda de Valencia, Venezuela) quedó destruida con los acontecimientos del fin de semana. El dolor se extendió en el barrio La Granja, en Engativá, donde residía Ricardo con su familia. También era este el lugar donde el joven acababa de montar su restaurante ‘By Rick’.
“No saben el dolor que sentimos sus amigos, sus mamá y sus familiares. Él era un muchacho alegre, ocurrente, con ganas de echar para delante con su restaurante que abrió hace 3 meses, tenía metas claras de lo que quería hacer en su vida”, dijo uno de sus amigos pidiendo que se aclare lo que ocurrió con Ricardo, pero esto no se sabrá a cabalidad, hasta que salga el dictamen de Medicina Legal en los próximos días.
Entidades juveniles se quejan:
Mientras los allegados de Ricardo denunciaron las negligencias mencionadas, otra organización llamada ‘Échele Cabeza’, encargada de velar por el ‘buen consumo de drogas’ (teniendo en cuenta que en estos eventos se presenta el consumo), afirmó haber entrevistado a cientos de asistentes y esto encontraron: “Después de interactuar con alrededor de 100 personas asistentes al evento, podemos resumir lo siguiente: (1) Fallas en la logística. Falta de ventilación y zonas de descanso; (2) personal de seguridad prohibiendo recargar termos de los lavamanos; (3) falta de agua para venta en barras desde las 2 a.m. aprox; (4) no había personal de primeros auxilios o atención médica; (5) muchas personas que nos han escrito insisten que el fallecido estuvo más de una hora en el segundo piso sin recibir atención”, declaró la entidad en un comunicado.
Organizadores se defienden:
Por otro lado, los organizadores del evento también se pronunciaron y su declaración parece contradecir lo dicho por los asistentes y la organización que hizo las entrevistas, cosa que ha generado todo un revuelo que sigue sin aclararse: (1) Sí se encontraba personal médico en el lugar; (2) se contaba con suficiente personal logístico; (3) había un mínimo vital de agua, más agua de la suficiente para tomar, es falso que se cerraron los grifos; (4) se contaba con utensilios y botiquines en diferentes partes del evento; (5) se contaba con personal jurídico y a diferencia de lo que dicen los detractores, se contaba con absolutamente todo”, declararon desde ‘TECH NO Bogotá’.