Mientras realizaban labores ordenadas de erradicación de cultivos, soldados del Ejército fueron retenidos por campesinos de las verdades de San Antonio, Chiquinquirá, El Progreso, Caño Raya, El Líbano, Nazareth, La Esmeralda y San Martín, que rechazaron la situación.
Se conoció que a los uniformados los llevaron a la escuela de esa zona; allí pasaron la noche y esperan la llegada de una comisión humanitaria que los liberará.
«Tensa situación»
Los protestantes pidieron la presencia de la Defensoría del Pueblo y organizaciones defensoras de derechos humanos, al igual que representantes del Gobierno, para hablar del tema y presentar una propuesta para salir concertadamente de esa situación. Además, solicitaron que se implemente un plan de sustitución de cultivos de uso ilícito y no arrancar a la fuerza, como ellos aseguran que se está dando.
“Es una situación muy delicada en la zona rural de Tibú. Hay unos soldados que están en una labor de erradicación y la comunidad está impidiendo esta situación; nosotros enviamos una comisión de funcionarios para mediar porque está bastante tensa la situación”, dijo Jaime Marthey, Defensor del Pueblo en Norte de Santander.
La Asociación de Campesinos del Catatumbo (Ascamcat) envió meses atrás una solicitud para que la situación fuera evaluada.
“La comisión política de la Asociación Campesina del Catatumbo hace un llamado a los organismos nacionales e internacionales defensores de derechos humanos ante el inicio de operaciones de erradicación forzosa de cultivos de uso ilícitos en la región en el municipio de #Tibu en la vereda ORU 7 y en el área rural de Cúcuta en la vereda vigilancia las comunidades se encuentran movilizadas en asentamientos campesinos ante la llegada de tropas de erradicación por parte del Ejército Nacional”, indicó Junior Maldonado, miembro de Ascamcat.