Quienes reportaron el caso señalaron que el hombre estaba muy exaltado y, al parecer, bajo influencia de sustancias alucinógenas. El sujeto fue reconocido como José, de 21 años y oriundo de Cereté, Córdoba. La Policía lo capturó por el delito contra la vida, la integridad física y emocional de los animales, establecido en la Ley 1774 de 2016, en el artículo 339A.
El animal, de inmediato, fue llevado a un centro veterinario, en donde se recupera y está fuera de peligro. En cuanto al agresor, deberá comparecer ante las autoridades y podría recibir una pena de entre 12 y 36 meses en prisión.
Rafael Otálvaro, secretario de Seguridad de Itagüí, confirmó que José era el dueño del perro agredido. “Hacemos un llamado a toda la comunidad a que denuncie este tipo de vejámenes (…) este es un delito autónomo, oficioso, que no reuqiere denuncias como tal. El solo conocimiento de un vejamen en contra de un animal obliga a la Fiscalía General de la Nación a adelantar el debido proceso”, expresó el funcionario.
Las sanciones para quien atente contra los animales están definidas en la ley 1774 de 2016. En ella se definió que estos no son cosas, sino seres sintientes. “Recibirán especial protección contra el sufrimiento y el dolor, en especial, el causado directa o indirectamente por los humanos”, reza dicha norma.