A una cárcel fue a parar un hombre investigado por su presunta participación en el crimen de su hijastro, un infante de tan solo 2 años de edad.
El señalado asesino fue procesado por homicidio agravado, delito imputado por un fiscal de la Unidad de Vida, que no fue aceptado durante las audiencias preliminares.
El aberrante caso que acabó con la vida de este angelito ocurrió el 14 de marzo de 2024. Ese día el cuerpo del pequeño llegó a la Unidad Hospitalaria de Santa Cruz.
Según la Fiscalía, la madre y el padrastro fueron interrogados por los galenos y estos les habrían manifestado que el día anterior el niño se había caído de la cama, golpeándose la cabeza. El hecho sucedió en una vivienda del barrio Popular.
“Sin embargo, los elementos materiales probatorios recaudados y el dictamen del Instituto Colombiano de Medicina Legal evidenciaron que el niño falleció por los golpes que le propinaron con un objeto contundente en la cabeza y otras partes del cuerpo”, reveló el ente investigador.
Por tal razón, un juez libró una orden de captura contra el sospechoso, la cual fue efectuada por funcionarios del Cuerpo Técnico de Investigación, en el barrio Las Granjas, de Manrique.