Aarón José Pérez Salazar, un joven venezolano que departía junto a un hombre y una mujer en la tarde del martes en un parque del barrio Britalia (Kennedy), fue cruelmente atacado a bala por la espalda por un sujeto que descargó varios disparos en su contra.
Tras el ataque, el cuerpo de este hombre cayó metros más adelante de donde se presentó el ataque, ante la mirada de varios comerciantes que vieron cómo escapaba descaradamente su asesino, justo en la carrera 85A con calle 43 sur.
El atroz crimen, que en un principio se presumía era una balacera, fue un ataque directo y furtivo en contra del hombre de 25 años, quien estaba sentado al lado de una cancha de fútbol a las 2:40 p.m., momento en que la muerte le llegó por la espalda personificada en un despiadado sicario que escapó en una moto manejada por otro tipo que lo esperaba cuadras más adelante del lugar de los hechos.
Ataque a traición
“Dicen que el muchacho al que mataron, había llegado a ese lugar porque le iban a pagar algo o que lo habían citado por algo, lo que cuentan es que el joven no duró mucho hablado con una pareja que al parecer lo conocía, cuando por la espalda, por la parte sur del parque, caminando le llegó otro tipo que apenas reconoció al finado, sacó un arma que tenía guardada en la pretina del pantalón y le empezó a disparar salvajemente”, comentó una fuente a Q’HUBO.
Según se pudo conocer, Aarón, al ver la reacción de sus acompañantes, quienes empezaron a correr cuando el sicario acciono la primera bala. Pérez intentó escapar del ataque directo en contra suya, pero, debido a que su atacante lo tenía a pocos metros de distancia Aarón, recibió tres disparos, en sus piernas y torso, mientras seguía intentando evadir la lluvia de pólvora en contra suya.
En ese momento el sicario, que había accionado el gatillo en varias oportunidades, se quedó sin balas, pero en cuestión de segundos este sujeto montó en su pistola otro proveedor, el cual desocupó en la dirección en la que Aarón se dirigía, hiriendo esta vez mortalmente en otras tres ocasiones a este muchacho.
La víctima, en su afán de salvar su vida, alcanzó a correr varios metros hasta que cayó en el borde del andén junto a varios locales, donde sucumbió ante la muerte, mientras el despiadado asesino llegó a ese lugar para asegurarse de haber acabado con la vida del joven que cumplía años ese mismo día.
Mientras el matón abordaba una moto negra a la vuelta del lugar del crimen, sobre la Avenida Ciudad de Cali, donde otro tipo lo esperaban para huir.
“Lo que hasta el momento se pudo establecer es que al parecer este hecho está relacionado con un ajuste de cuentas. Estamos trabajando en la recolección de información al Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), que se encuentra en este momento realizando la inspección al lugar de los hechos”, informó el coronel Julio Botero, comandante de Policía de Bogotá.