La delicada situación que se comenzó a vivir en el país a raíz del asesinato de la niña Sofía Delgado en el municipio de Candelaria (Valle del Cauca), y que ha provocado una paranoia ante la difusión de informaciones relacionadas con rapto de menores, casi termina en una tragedia en la tarde de este miércoles 23 de octubre en la Zona Norte de Cartagena.
Un albañil que trabaja en una construcción cercana a la Vía del Mar casi es linchado por una turba a raíz de un rumor que se originó cuando lo vieron cerca de la institución educativa del corregimiento de Pontezuela.
El hecho, le confirmó la Policía Metropolitana a El Universal, ocurrió a eso de las 12:30 p. m. Las informaciones oficiales indican que el hombre llegó a Pontezuela por un “chance” que le dieron desde el lugar donde labora.
El albañil se dirigía a su casa, en el municipio de Clemencia, pero quien le hizo el favor de darle el “chance” solo pudo trasladarlo hasta Pontezuela.
Allí, en la vía principal, que va de ese corregimiento a Bayunca, el albañil se puso a esperar un transporte que lo llevara a Clemencia. La Policía confirmó con testigos que al hombre lo vieron haciéndole señas a conductores de buses y de otros vehículos para que lo llevaran al menos a la vía de La Cordialidad.
Tal parece, sin embargo, que un rumor entre algunas personas que estaban cerca, y que comenzaron a especular sobre la presencia de aquel supuesto desconocido cerca de un colegio, llevaron a unos sujetos a rodear al albañil y a comenzar a golpearlo brutalmente.
Los rumores fueron creciendo a medida que la gente se iba sumando al salvaje ataque contra aquel hombre que no podía defenderse ante una turba que lo agredía con palos, cuchillos y hasta botellas, tal y cual como se observa en videos que se comenzaron a difundir en las redes sociales y en los que se observa al albañil tratando de defenderse y gritando.
La Policía reaccionó rápidamente y fue así como pudo rescatar de la comunidad enardecida al albañil y llevarlo de inmediato a un lugar seguro. Luego, lo trasladaron a una clínica en Cartagena, en donde aún es atendido a causa de las múltiples heridas que sufrió.
Al enterarse de la situación, familiares, vecinos y amigos de la víctima se trasladaron de Clemencia a Pontezuela para dejar en claro que aquel hombre es un trabajador que solo se dirigía a su casa para almorzar.
La Policía Metropolitana le aseguró a El Universal que los mismos residentes de Pontezuela confirmaron que nunca le vieron ninguna actitud sospechosa a aquel hombre que hoy es víctima de una paranoia que se ha tomado el país a raíz de lo sucedido con la pequeña Sofía Delgado.
“No es rapto de niños”
En un comunicado de prensa, la Alcaldía de Cartagena informó que lo ocurrido en Pontezuela obedeció a un caso relacionado con vandalismo.
“Encapuchados armados en Pontezuela son vándalos y no se trata de un caso de rapto de niños”, dijo Bruno Hernández, secretario del Interior.
En inmediaciones del barrio Policarpa, dice la Alcaldía, sujetos encapuchados y armados con machetes protagonizaron desmanes en la vía, relacionados con el modus operandi de subirse a los camiones de carga para hurtar.
Al ser enfrentados por la comunidad, fueron golpeados y rodeados hasta que llegó la Policía Metropolitana de Cartagena para controlar la situación y ponerlos a disposición de la justicia.
“En aras de aclarar la desinformación que circula sobre que lo que buscaban ocultando sus identidades era raptar niños en la zona, la Alcaldía de Cartagena, a través de la Secretaría del Interior, precisa que no se trató de ninguna situación que pusiera en peligro a la niñez, sino unos presuntos rateros conocidos en el sector”, señala Hernández.
A espera de cómo transcurren las investigaciones, se invita a la ciudadanía a la tranquilidad ante supuestos raptos de niños en Cartagena.