La mañana de ayer, un ataque violento sacudió la estación de Policía de San Calixto, cuando un francotirador asesinó al subteniente Anderson Yassing Gómez Posada, de 27 años.
El hecho se registró sobre las 8:30 de la mañana cuando el municipio retomaba la tranquilidad tras una semana de ferias y fiestas. Por estos días, la comunidad seguía celebrando los 179 años de municipalidad.
Cuando los uniformados adelantaban sus labores diarias en la estación, se dio inicio a un hostigamiento, al parecer, orquestado por el Ejército de Liberación Nacional (Eln).
En medio del intercambio de disparos que se desató, un francotirador apuntó al oficial y le disparó en el abdomen.
En unas cámaras de seguridad de la estación se pudo observar el momento exacto en el que Gómez Posada se tocó su herida y cayó tendido en el suelo.
El joven fue rápidamente auxiliado por sus compañeros que lo llevaron hasta un lugar seguro a la espera de que un helicóptero lo trasladara a la Clínica Medical Duarte de Cúcuta. Pero, al llegar, ya no contaba con signos vitales.
En el ataque también resultó herida una menor, de 15 años, estudiante de la Institución Educativa Cayetano Franco Pinzón, que transitaba por el sector cuando se dio lugar al hostigamiento.
La adolescente fue remitida al centro médico junto con el oficial, en donde permanece recuperándose.
Recompensa
Tras conocer los hechos y en medio del dolor causado por la muerte del oficial, las autoridades dieron a conocer una millonaria recompensa que permita ubicar a los responsables del crimen.
“Se dispuso una recompensa de hasta 100 millones de pesos para quien con su información permita la identificación y posterior captura de los asesinos”, indicó la Policía de Norte de Santander en un comunicado.
A pesar de los repetidos intentos de este medio por obtener declaraciones del comandante (e) de la Policía del departamento, coronel Amaury Aguilera, no fue posible lograr una respuesta.
Las autoridades han guardado silencio frente al recrudecimiento de la violencia que se ha registrado en el último mes en Norte de Santander, donde se han presentado masacres y asesinatos en los diferentes municipios.
Iba a cumplir años
A solo dos días de cumplir 28 años, el subteniente Gómez fue asesinado, truncando su vida antes de alcanzar esa fecha. Además, en diciembre completaría sus cinco años dentro de la Institución.
El subteniente Gómez, un joven oriundo de Anapoima (Cundinamarca), inició su carrera en la Policía al graduarse como subteniente y fue asignado a Neiva, donde sirvió durante dos años.
En enero, fue trasladado a Norte de Santander, adscrito a Ocaña, donde desempeñaba labores en un CAI y, en varias ocasiones, asumió funciones como subcomandante de la estación municipal.
Su dedicación, profesionalismo y carácter lo llevaron, en abril, a ser nombrado comandante de la estación de Policía de San Calixto, cargo en el que ya llevaba cinco meses y medio.
Tanto sus compañeros como la comunidad lo recordarán como un oficial ejemplar, siempre comprometido y cercano a la gente.
Su pasión por el uniforme se reflejaba en su hoja de vida, que incluye 27 felicitaciones y 2 condecoraciones.
