El pasado 15 de julio en Apartadó, Antioquia, Keimi Melissa Cuesta, de 27 años, fue brutalmente asesinada por su expareja Kevin Ayala frente a su hija de cinco años. Este trágico hecho ocurrió en el barrio La Esperanza de este municipio del Urabá antioqueño.
La mujer estaba en su casa alrededor de las 6:00 a.m. cuando su excompañero sentimental, aparentemente en estado de embriaguez, ingresó a la residencia por una ventana. Una vez que entró, comenzaron una fuerte discusión, porque el agresor se negaba a terminar la relación.
Ante la negativa de la mujer, el hombre la atacó y apuñaló con uno de los vidrios de la ventana, todo en presencia de su hija pequeña. Tras el ataque, el agresor huyó, dejando a la mujer malherida.
La comunidad alertó a las autoridades, quienes trasladaron a la víctima al hospital Fundadores de Apartadó, donde lamentablemente falleció.
La Policía inició la búsqueda del sospechoso y lo encontró en el sector Fundadores. Kevin Ayala, de 26 años, decidió entregarse y confesó el crimen.
Se supo de manera extraoficial que Ayala tenía antecedentes por lesiones personales y violencia intrafamiliar, delitos por los cuales ya había cumplido una condena en prisión. Tras su confesión, fue capturado y puesto a disposición de la Fiscalía para responder por los delitos imputados.